Tiempo empleado: 19 días
Fechas: 29 Abril 2009 - 17 Mayo 2009
Clima: Exceptuando la visita a la Gran Muralla, el resto del tiempo fue soleado con temperaturas superiores a los 20 grados
Mapa Ruta: Mapa Google Maps
Costes:
Alojamiento: 395元
Comida:1291,4元
Transporte: 1241,4元
Entradas: 1212,3元
Regalos: 812元
Otros: 141,6元
Total: 5093,7元 (unos 500€ aproximadamente). A esto habría que sumarle el precio de los vuelos, pero que al haber sido por la agencia, no tenemos datos concretos.
Idioma: Si sabes algo de chino, estás salvado, ya que el inglés no es algo que se estudie como aquí. Muy poca gente se atreve a hablar en inglés cuando les preguntas, así que es bastante complicado comunicarse. Un truco es acudir a la recepción de los hoteles, allí seguro que os atienden de maravilla, aunque no seais clientes.
Cosas imprescindibles:
- Diccionario chino-español, español-chino.
- Papel higiénico.
- Un carné con la palabra STUDENT.
Consejos:
- Preparaos para la comida picante.
- Para conseguir billetes de tren o autobús, intentad que os escriban en chino lo que quereis, antes de llegar a la taquilla.
- Pedid las bebidas frias, porque por defecto os las traen del tiempo o calientes.
- No trateis de pronunciar palabras del diccionario, no os entenderán, es mejor enseñarles la palabra escrita en chino y que la lean ellos.
- Algo de vocabulario útil, con la pronunciación en español:
* Hola = Nijao
* Gracias = Shi shie
* Barato = Piañi
* Caro = Tancuei
* Somos 6 = Liú ga dá
* Agua = Suei
* Cerveza = Píñiu
* Fria = Liang da
* Gratis = Meinfei
* Arroz = Mifán
Viaje de Samu y Davinia a China. Con la mochila y un grupo del Paso del Noroeste.
domingo, 30 de agosto de 2009
domingo, 17 de mayo de 2009
DOMINGO 17/05/09: SHANGHAI - PARÍS - MADRID
6:30h: Joooo, que sueñooooo!!
7:00h: Cogemos el metro (4元) para ir a coger el tren bala.
7:40h: 40元 cada uno por usar el tren más rápido del mundo.
8:00-8:08h: 301km/h y 8 minutos para llegar al aeropuerto.
9:00h: Desayunamos dentro de la terminal para terminar el bote. 25元 un plato de patatas, 30元 un sandwich y 8元 un refresco.
11:40h: El vuelo sale con retraso. Esta vez nos ha tocado a todos juntos en el avión.
14:00h: Nos traen la comida. Al estar atrás sólo llegan los restos. Sólo hay una bandeja de comida europea. Le pongo cara de pena a la azafata mientras le digo: "chinese food, no, please". La consigo!! Menos mal, comida normal por fin. Se acabó el arroz y el picante. Zzz..
18:00h: (hora china) Huele a comida. Están repartiendo noodles de bote. Yo que pensaba que me libraba de la comida china.. pues no!
18:30h: (hora española) Llegamos a París. Tenemos 5 minutos para cambiar de terminal, pasar por los controles y llegar al vuelo de Madrid. Salimos a la carrera, y aunque nos colamos en todos los controles, no llegamos a tiempo. Nos cambian los billetes para el siguiente vuelo (19:30-21:30)
19:30h: Estamos todos separados. El vuelo no es largo y se aguanta bien. Nos vuelven a dar de cenar. Y ya van 3 cenas hoy!!
21:30h: Por fin! estamos en casa! Las maletas han llegado todas. Nos despedimos del grupo y cada uno coge su camino. Todos tenemos ganas de llegar cuanto antes. Y bueno, aquí acaba la aventura china. Esperemos encontrarnos alguna vez..
En resumen el viaje habrá tenido sus más y sus menos, pero en general ha sido una experiencia inolvidable y totalmente recomendable. La cultura china es algo digno de conocer y vivir en tus propias carnes. Nosotros nos quedamos con ganas de volver a las zonas que no pudimos visitar. Ojalá podamos ir algún día y dejar constancia del viaje en otro blog.
Nuestro próximo objetivo, Noruega: http://noruegaenlamochila.blogspot.com
Nos vemos!!
7:00h: Cogemos el metro (4元) para ir a coger el tren bala.
7:40h: 40元 cada uno por usar el tren más rápido del mundo.
8:00-8:08h: 301km/h y 8 minutos para llegar al aeropuerto.
9:00h: Desayunamos dentro de la terminal para terminar el bote. 25元 un plato de patatas, 30元 un sandwich y 8元 un refresco.
11:40h: El vuelo sale con retraso. Esta vez nos ha tocado a todos juntos en el avión.
14:00h: Nos traen la comida. Al estar atrás sólo llegan los restos. Sólo hay una bandeja de comida europea. Le pongo cara de pena a la azafata mientras le digo: "chinese food, no, please". La consigo!! Menos mal, comida normal por fin. Se acabó el arroz y el picante. Zzz..
18:00h: (hora china) Huele a comida. Están repartiendo noodles de bote. Yo que pensaba que me libraba de la comida china.. pues no!
18:30h: (hora española) Llegamos a París. Tenemos 5 minutos para cambiar de terminal, pasar por los controles y llegar al vuelo de Madrid. Salimos a la carrera, y aunque nos colamos en todos los controles, no llegamos a tiempo. Nos cambian los billetes para el siguiente vuelo (19:30-21:30)
19:30h: Estamos todos separados. El vuelo no es largo y se aguanta bien. Nos vuelven a dar de cenar. Y ya van 3 cenas hoy!!
21:30h: Por fin! estamos en casa! Las maletas han llegado todas. Nos despedimos del grupo y cada uno coge su camino. Todos tenemos ganas de llegar cuanto antes. Y bueno, aquí acaba la aventura china. Esperemos encontrarnos alguna vez..
En resumen el viaje habrá tenido sus más y sus menos, pero en general ha sido una experiencia inolvidable y totalmente recomendable. La cultura china es algo digno de conocer y vivir en tus propias carnes. Nosotros nos quedamos con ganas de volver a las zonas que no pudimos visitar. Ojalá podamos ir algún día y dejar constancia del viaje en otro blog.
Nuestro próximo objetivo, Noruega: http://noruegaenlamochila.blogspot.com
Nos vemos!!
sábado, 16 de mayo de 2009
SÁBADO 16/05/09: SHANGHAI
8:00h: Arriba!
9:00h: Desayuno de bufet en el albergue (25元 cada uno). Volvemos a encontrarnos al tio Tom, poniéndose hasta las patas de huevos fritos, salchichas, arroz... lleva la misma ropa sudada de días anteriores. Allí le dejamos desayunando. Miramos un poco Internet y jugamos con los gatitos, que hoy les ha dado por dormirse en un bonsai. Cogemos el metro para ir a ver el museo de la Ciencia (4元), mientras Ana visita el de Arte.
10:00h: La entrada son 60元 + 40元 de una peli del mundo submarino en 3D. El edificio es muy grande y moderno. Tiene exposiciones interesantes sobre animales, entornos tropicales, el mundo de las arañas, robots, inventos, experimentos de física, el cuerpo humano, el espacio.. Todo es interactivo y orientado en su mayor parte a los niños, pero se pasa una mañana entretenida. La peli en 3D está muy conseguida, tanto, que el relax del buceo consigue que nos quedemos todos fritos en el asiento y con las gafotas puestas.
17:00h: Terminamos de verlo todo y vamos a las compras!!! En la misma parada del metro del museo, hay un mercado subterráneo enorme, infinito, interminable... de tiendas de imitaciones y souvenirs. Nos pasamos allí tres horas. El resultado: 6 pares de zapatillas Converse por 50元 cada uno, unos imanes por 10元, un vestido de Custo por 70元, pulsera por 58元, camisetas Billabong y Quicksilver por 30元 cada una, gorro por 30元, guitarra para la Wii por 120元, sudadera por 70元, bolso por 90元, kimono por 100元, chándal por 85元 y maleta Samsonite para llevarlo todo por 200元. Habría necesitado otro día más para comprar con más tranquilidad, pero ya no queda más tiempo.
20:30h: Vuelta al albergue en metro (4元) para dejar las comprar e ir a cenar. Justo en la salida del metro hay una peluquería fashipon. Ana y yo nos quedamos a cortanos el pelo. A ver qué resulta de esto!!! Nos sientan en las sillas de cortar y traen un poco de jabón y un biberón de cocina con agua. Nos empiezan a lavar la cabeza allí mismo, sólo con espuma, sin gotear nada. Lo lavan a conciencia. Incluso te dan un masaje. Para aclarar ya te pasan a las pilas, que nada tienen que ver con las torturas de cuello españolas. Aquí tienen como una cama sofá que es más cómodo que cualquier cama de las que hemos tenido en todo el viaje. Ahí te aclaran, te echan suavizante, te vuelven a aclarar y te pasan a cortar. A mi me toca el "Ruper" chino, super fashion, habilidoso y meticuloso con el corte. Mediante gestos indicamos el largo que nos queremos cortar, y el resto, es creación del chino. Primero corta, después te seca para ver el volumen, y rectifica. Te vuelven a lavar la cabeza, y ya el peluquero te seca y te peina. Me gusta el corte y es todo un show ver cómo cortan el pelo. Y todo por 68元!!! Me lo llevo para España!!
21:30h: Volvemos al albergue para ir a cenar. Cogemos un taxi (12元) para ir a un brasileño a gastarnos lo que nos queda de bote, pero al llegar resulta que han cambiado el restaurante de sitio y no sabemos dónde ir.
23:00h: Entramos a un chino que parece que no cierra por la noche (471元). Taxi de vuelta al albergue porque está lloviendo (18元). Rehacemos todas las maletas, que mañana hay que salir a las 7.
Última noche en China.
Zzz... Zzz
9:00h: Desayuno de bufet en el albergue (25元 cada uno). Volvemos a encontrarnos al tio Tom, poniéndose hasta las patas de huevos fritos, salchichas, arroz... lleva la misma ropa sudada de días anteriores. Allí le dejamos desayunando. Miramos un poco Internet y jugamos con los gatitos, que hoy les ha dado por dormirse en un bonsai. Cogemos el metro para ir a ver el museo de la Ciencia (4元), mientras Ana visita el de Arte.
10:00h: La entrada son 60元 + 40元 de una peli del mundo submarino en 3D. El edificio es muy grande y moderno. Tiene exposiciones interesantes sobre animales, entornos tropicales, el mundo de las arañas, robots, inventos, experimentos de física, el cuerpo humano, el espacio.. Todo es interactivo y orientado en su mayor parte a los niños, pero se pasa una mañana entretenida. La peli en 3D está muy conseguida, tanto, que el relax del buceo consigue que nos quedemos todos fritos en el asiento y con las gafotas puestas.
17:00h: Terminamos de verlo todo y vamos a las compras!!! En la misma parada del metro del museo, hay un mercado subterráneo enorme, infinito, interminable... de tiendas de imitaciones y souvenirs. Nos pasamos allí tres horas. El resultado: 6 pares de zapatillas Converse por 50元 cada uno, unos imanes por 10元, un vestido de Custo por 70元, pulsera por 58元, camisetas Billabong y Quicksilver por 30元 cada una, gorro por 30元, guitarra para la Wii por 120元, sudadera por 70元, bolso por 90元, kimono por 100元, chándal por 85元 y maleta Samsonite para llevarlo todo por 200元. Habría necesitado otro día más para comprar con más tranquilidad, pero ya no queda más tiempo.
20:30h: Vuelta al albergue en metro (4元) para dejar las comprar e ir a cenar. Justo en la salida del metro hay una peluquería fashipon. Ana y yo nos quedamos a cortanos el pelo. A ver qué resulta de esto!!! Nos sientan en las sillas de cortar y traen un poco de jabón y un biberón de cocina con agua. Nos empiezan a lavar la cabeza allí mismo, sólo con espuma, sin gotear nada. Lo lavan a conciencia. Incluso te dan un masaje. Para aclarar ya te pasan a las pilas, que nada tienen que ver con las torturas de cuello españolas. Aquí tienen como una cama sofá que es más cómodo que cualquier cama de las que hemos tenido en todo el viaje. Ahí te aclaran, te echan suavizante, te vuelven a aclarar y te pasan a cortar. A mi me toca el "Ruper" chino, super fashion, habilidoso y meticuloso con el corte. Mediante gestos indicamos el largo que nos queremos cortar, y el resto, es creación del chino. Primero corta, después te seca para ver el volumen, y rectifica. Te vuelven a lavar la cabeza, y ya el peluquero te seca y te peina. Me gusta el corte y es todo un show ver cómo cortan el pelo. Y todo por 68元!!! Me lo llevo para España!!
21:30h: Volvemos al albergue para ir a cenar. Cogemos un taxi (12元) para ir a un brasileño a gastarnos lo que nos queda de bote, pero al llegar resulta que han cambiado el restaurante de sitio y no sabemos dónde ir.
23:00h: Entramos a un chino que parece que no cierra por la noche (471元). Taxi de vuelta al albergue porque está lloviendo (18元). Rehacemos todas las maletas, que mañana hay que salir a las 7.
Última noche en China.
Zzz... Zzz
viernes, 15 de mayo de 2009
VIERNES 15/05/09: SHANGHAI
9:00h: Arriba! A ducharse y prepararse para hoy.
10:00h: Desayunamos en el buffet del albergue (25元 cada uno). Huevos fritos, revueltos, salchichas, bacon, arroz, sandwiches, fruta, zumo, leche, café y té. Allí conocemos a Tom. Un señor jubilado de Bristol, que lleva 4 meses en China, y es la tercera vez que viaja al país, huyendo del frio de su tierra. Es un mochilero auténtico. Aprovechas el dinero hasta el último céntimo, y se pone hasta arriba en el desayuno. Allí le dejamos.
Hoy queremos ir a visitar el barrio antiguo, los mercadillos y la concesión francesa. Lo ideal sería ir en bici pero en esta ciudad no hay alquiler. Vamos en metro (3元) hasta la zona del barrio tradicional. Está todo reconvertido al turismo y aunque el entorno de casas tradicionales es bonito, no es del todo auténtico. Nos damos unas vueltas por los tenderetes de souvenirs y compramos algunas cosas. Yo compro el juego de dominó chino, el Mah Yong, por 150元. Ana se compra un ábaco pequeño por 50元.
Por la zona están los jardines Yuyang, que al parecer son los mejores de la ciudad por el estado de conservación (40元 cada uno). Son bonitos y nos alivian el calor durante un rato.
A la salida nos vamos a la zona de antigüedades. Aquí las tiendas las dejan descuidadas y ni se molestan en colocar la mercancía para que así coja polvo y parezca más antiguo, ya que todo lo que allí se vende, es falso, por supuesto.
Ana y Joan se compran unas cajitas con forma de donut por 60元, y además unos nunchacus (o como se escriba), una camiseta de Mao, un instrumento musical hecho con dos trozos de bambú...
Llegamos a un puesto, en apariencia igual que el resto, pero que tiene algo que le hace particular. Un chino te hace una réplica de ti mismo en una figurita de plastilina. Samu, Julio, Joan y yo nos hacemos uno por 100元 cada uno, más 60元 la urna pequeña, y 80元 la urna grande.
A mi muñeco le tiene que amputar un brazo para que entre en el bote, pero aún así está conseguido. El más real es el de Joan por los detalles de las rastas y las gafas. Hoy nos dividimos para comer porque se ha hecho tarde. Julio, Samu y yo vamos al McDonalds (22元 cada menú). El resto van a comer dumplings al mercadillo.
17:00h: Cuando estábamos recogiendo los muñecos, nos encontramos al señor mochilero del albergue. Le invitamos a acompañarnos en la visita a la concesión francesa. Cogemos un bus de dos pisos descapotable (2元). El barrio es otra de las tantas zonas comerciales (pijas) y financieras de la ciudad. Apenas dos calles conservan la arquitectura de pequeños adosados de cuando los franceses estuvieron por allí. Además al estar reconvertidos en tiendas, pasan totalmente desapercibidos. La única casa que resalta es la Casa Noruega. Una villa atípica en medio de otro mundo, convertida en hotel de lujo.
Deciden tomar algo en alguna terraza por allí. En principio no se ve ningún café o pub, pero aparece un patio con unas mesas y entramos. Se piden unas cervezas y una coca-cola. Estamos un rato de charla con Tom, que por supuesto no consume nada, y pedimos la cuenta... 100元 por cuatro cervezas!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! El mierda de chino mafioso, hasta se rie cuando nos pide el dinero. Yo porque no he consumido nada, pero si no, no le daba ni un duro. Que pena de insultos en chino para decirle cuatro cosas. Estafador!!!!!! Para quitarnos el mal sabor de boca nos vamos en busca de un sitio para cenar. Justo enfrente de la casa noruega, hay un restaurante mongol con espectáculo incluído, donde se come bien y se pasa un buen rato (276元). Tom en su línea, no pide nada para cenar, pero se sienta a la mesa y se bebe el té, que es gratis. Qué tio!! lleva todo el día con lo que comió en el desayuno.
23:00h: Volvemos andando al albergue. Por el camino unos jóvenes chinos nos ofrecen polos de Lacoste por 15元. Samu está a punto de comprarse uno sin ni siquiera probárselo. Cuando lo abre, resulta ser una M, pero de niño!! Estos chinos nos la querían colar, pero nos lo tomamos con humor.
Zzz Zzz
10:00h: Desayunamos en el buffet del albergue (25元 cada uno). Huevos fritos, revueltos, salchichas, bacon, arroz, sandwiches, fruta, zumo, leche, café y té. Allí conocemos a Tom. Un señor jubilado de Bristol, que lleva 4 meses en China, y es la tercera vez que viaja al país, huyendo del frio de su tierra. Es un mochilero auténtico. Aprovechas el dinero hasta el último céntimo, y se pone hasta arriba en el desayuno. Allí le dejamos.
Hoy queremos ir a visitar el barrio antiguo, los mercadillos y la concesión francesa. Lo ideal sería ir en bici pero en esta ciudad no hay alquiler. Vamos en metro (3元) hasta la zona del barrio tradicional. Está todo reconvertido al turismo y aunque el entorno de casas tradicionales es bonito, no es del todo auténtico. Nos damos unas vueltas por los tenderetes de souvenirs y compramos algunas cosas. Yo compro el juego de dominó chino, el Mah Yong, por 150元. Ana se compra un ábaco pequeño por 50元.
Por la zona están los jardines Yuyang, que al parecer son los mejores de la ciudad por el estado de conservación (40元 cada uno). Son bonitos y nos alivian el calor durante un rato.
A la salida nos vamos a la zona de antigüedades. Aquí las tiendas las dejan descuidadas y ni se molestan en colocar la mercancía para que así coja polvo y parezca más antiguo, ya que todo lo que allí se vende, es falso, por supuesto.
Ana y Joan se compran unas cajitas con forma de donut por 60元, y además unos nunchacus (o como se escriba), una camiseta de Mao, un instrumento musical hecho con dos trozos de bambú...
Llegamos a un puesto, en apariencia igual que el resto, pero que tiene algo que le hace particular. Un chino te hace una réplica de ti mismo en una figurita de plastilina. Samu, Julio, Joan y yo nos hacemos uno por 100元 cada uno, más 60元 la urna pequeña, y 80元 la urna grande.
A mi muñeco le tiene que amputar un brazo para que entre en el bote, pero aún así está conseguido. El más real es el de Joan por los detalles de las rastas y las gafas. Hoy nos dividimos para comer porque se ha hecho tarde. Julio, Samu y yo vamos al McDonalds (22元 cada menú). El resto van a comer dumplings al mercadillo.
17:00h: Cuando estábamos recogiendo los muñecos, nos encontramos al señor mochilero del albergue. Le invitamos a acompañarnos en la visita a la concesión francesa. Cogemos un bus de dos pisos descapotable (2元). El barrio es otra de las tantas zonas comerciales (pijas) y financieras de la ciudad. Apenas dos calles conservan la arquitectura de pequeños adosados de cuando los franceses estuvieron por allí. Además al estar reconvertidos en tiendas, pasan totalmente desapercibidos. La única casa que resalta es la Casa Noruega. Una villa atípica en medio de otro mundo, convertida en hotel de lujo.
Deciden tomar algo en alguna terraza por allí. En principio no se ve ningún café o pub, pero aparece un patio con unas mesas y entramos. Se piden unas cervezas y una coca-cola. Estamos un rato de charla con Tom, que por supuesto no consume nada, y pedimos la cuenta... 100元 por cuatro cervezas!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! El mierda de chino mafioso, hasta se rie cuando nos pide el dinero. Yo porque no he consumido nada, pero si no, no le daba ni un duro. Que pena de insultos en chino para decirle cuatro cosas. Estafador!!!!!! Para quitarnos el mal sabor de boca nos vamos en busca de un sitio para cenar. Justo enfrente de la casa noruega, hay un restaurante mongol con espectáculo incluído, donde se come bien y se pasa un buen rato (276元). Tom en su línea, no pide nada para cenar, pero se sienta a la mesa y se bebe el té, que es gratis. Qué tio!! lleva todo el día con lo que comió en el desayuno.
23:00h: Volvemos andando al albergue. Por el camino unos jóvenes chinos nos ofrecen polos de Lacoste por 15元. Samu está a punto de comprarse uno sin ni siquiera probárselo. Cuando lo abre, resulta ser una M, pero de niño!! Estos chinos nos la querían colar, pero nos lo tomamos con humor.
Zzz Zzz
jueves, 14 de mayo de 2009
JUEVES 14/05/09: SUZHOU - SHANGHAI
7:00h: Arriba! que hay que recoger y llegar a la estación para coger el tren que nos lleve a Shanghai. La verdad es que este albergue ha sido bastante malo. Además hay algo que me ha picado en el brazo y que crece por momentos.
8:00h: Cogemos un autobús que nos lleva directos a la estación de tren, por 2元 cada uno. Allí compramos los billetes para el siguiente tren. Lo más barato es ir de pie, y como el trayecto no es muy largo, compramos los baratos (26元 cada uno). Compramos algo de desayuno (50元) y a esperar.
9:30h: El tren tiene muy buena pinta. Una pena tener que ir de pie. Por lo visto el baño está impracticable por un pastel que han dejado plantado. Todo el que abre la puerta pone cara de asco-susto-asombro y se va por donde ha venido.
Al final resulta que en media hora hemos llegado. Se ha hecho muy corto.
10:00h: Cogemos el metro en la misma estación de tren (3元 cada billete) y en 3 paradas ya estamos en el albergue.
El albergue está muy bien: terraza, billar, baños de taza y limpios, camas blandas, bar/restaurante... Está justo en el centro, al lado del metro y de la famosa calle Nanjing. Todo por 35元 por noche y persona. Hay una familia de gatitos blancos guapísimos, con ojitos azules y que no tendrán más de 2 semanas.
Dejamos las mochilas en el albergue y salimos a conocer la ciudad. Seguimos toda la calle Nanjing hasta el Bund. Es impresionante el número de rascacielos que tiene la ciudad por todas partes. La calle es comercial por completo. Termina un centro comercial y empieza otro. Tiendas de marca, ropa, joyerías, tecnología, souvenirs e imitaciones. Muchos chinos se acercan con un muestrario de relojes, bolsos, iPods...Samu va buscando un iPhone, así que acompaña a uno de estos vendedores a la trastienda de una tienda de trajes chinos. Yo me quedo fuera por si acaso no vuelven a salir y es necesario ir a buscar ayuda, jejejeje. Al rato aparecen sin nada. Todo son imitaciones malas. Nada que merezca la pena.
Llegamos al Bund.
Está todo levantado por las obras que están haciendo en la ciudad de cara a la Expo del 2010. Aún así han dejado acceso al paseo del rio para poder ver el Skyline. Hay edificios de todos los tamaños, formas y colores. Todos con pantallas de televisión descomunales. Por la noche debe ser impresionante el despliegue de luces que debe tener, visto lo que les gusta a los chinos iluminar todos los edificios y carteles de publicidad. Comemos en un pequeño restaurante en el que toda la comida pica (159元). Al parecer lo más destacable es el baño del local. Samu le llama "la acequia", está en el fondo, atravesando la cocina, en una especie de cuadra con un surco excavado en el suelo por el que fluyen líquidos y sólidos. Gracias a Dios no hay fotos de eso.
16:30h: Cogemos el metro (3元) para cruzar al otro lado del Bund.
Desde allí las torres parecen interminables. Queremos subir a alguna de las que dicen ser las más altas. La Lonely sólo trae referencia de una de ellas porque "el abridor" no estaba terminado cuando la escribieron. Ahora, esta última está entre las 2 más altas del mundo.
Vamos a la que indica la guía, porque cuentan un truco para evitar pagar los 88元 que cuesta subir a la planta 88. Las últimas plantas pertenecen a un hotel de superlujo. Se puede llegar hasta el bar en la planta 87, gratis. Allá que vamos, con nuestras pintas de mochileros, a colarnos en el hotelazo. En todas las plantas hay una persona que te recibe al salir del ascensor y te indica cómo llegar al siguiente. Las paredes son doradas, con madera, los suelos con alfombras, esculturas, cuadros...
Al llegar a la planta 85, el ascensor te provoca que se taponen los oidos.. Hay que cambiar de ascensor para subir las dos últimas plantas, y al salir al pasillo, alucinamos con lo que vemos.. un gran agujero inmenso de 85 plantas que al mirarlo desde arriba hace una forma de espiral dorada preciosa.
Terminamos de subir, llegamos al super bar y nos encontramos con un recepcionista... Parece que no hay forma de librarse del pago en esta torre para ver las vistas. En la carta los precios son acordes con el sitio, y lo más barato es un helado de 2 bolas por 50元. Samu y yo compartimos uno, el resto piden helados y cerveza(70元).
Para describir las vistas mejor ver las fotos desde el bar.
Al llegar éramos los únicos que estábamos en el bar, pero al rato empiezan a llegar más grupos de mochileros, utilizando el mismo truco que nosotros para no pagar. A todos nos ponen en la misma zona, lejos de la gente pudiente, y nos dan un cuenco de cacahuetes rebozados picantes.
Está empezando a oscurecer y decidimos bajar para ver el Bund iluminado. Al pasar por la torre del "abridor" vemos que se puede subir hasta arriba por 150元.Julio y César suben para hacer fotos. Los demás nos damos un paseo entre los rascacielos. Vamos a ver "La perla de Oriente". El repetidor de TV con forma de nave espacial de color fucsia. Un horror, pero llamativa.
Los edificios empiezan a iluminarse y a moverse!! Todos tienen algún tipo de "baile" de luces y viedo pantallas gigantes.
Al bajar, los Dalton nos cuentan la experiencia. Merece la pena ya que las vistas son espectaculares. Pero lo mejor es el baño. Si, si, el baño! Como es de libre acceso, allá que vamos!! Resulta ser el baño del siglo XXII. Es una taza caliente con un mando de opciones para regular la temperatura, tipos de lavado, chorro frontal, trasero, en círculos, regulador de presión y temperatura del agua, y tiempo del programa completo. Todo un descubrimiento para nosotros.
Visto el baño, cogemos el metro (3元) para cruzar al Bund y ver el skyline de noche. Increible el gasto de energía de esta gente. Y qué decir de la contaminación lumínica que genera. Hasta los barcos tienen lucecitas. Esta ciudad se transforma de noche.
Ah! Comentar que nos han intentado timar una pareja de chinos, bien vestidos y con cara de buena gente, que decían que habían perdido la cartera y necesitaban dinero para el taxi. Menos mal que antes lo han intentado con Ana y Joan, y nos avisan de la treta, porque estábamos a punto de darles algo.
21:30h: Se nos ha hecho un poco tarde y tenemos que cenar. Hoy elige Joan, por la del subway del otro día. Vamos a un chino donde están casi cerrando y no hay nadie más cenando.
Nos sirven y mientras comemos, aparecen gatos por la sala, los cocineros recogiendo las verduras y dejándolas en bolsas en la puerta, el que parece el dueño aparece con un Tchao Tchao blanco y lo sube a una mesa del restaurante. El perro allí se tumba, come, ladra...En fin, de no creer!! La cena sale por algo menos de 300元. En el albergue hay mucha animación siempre que llegamos de noche, pero estamos tan reventados que vamos directos a la cama. Y mientras mi picadura sigue creciendo!!
Zzz Zzz..
8:00h: Cogemos un autobús que nos lleva directos a la estación de tren, por 2元 cada uno. Allí compramos los billetes para el siguiente tren. Lo más barato es ir de pie, y como el trayecto no es muy largo, compramos los baratos (26元 cada uno). Compramos algo de desayuno (50元) y a esperar.
9:30h: El tren tiene muy buena pinta. Una pena tener que ir de pie. Por lo visto el baño está impracticable por un pastel que han dejado plantado. Todo el que abre la puerta pone cara de asco-susto-asombro y se va por donde ha venido.
Al final resulta que en media hora hemos llegado. Se ha hecho muy corto.
10:00h: Cogemos el metro en la misma estación de tren (3元 cada billete) y en 3 paradas ya estamos en el albergue.
El albergue está muy bien: terraza, billar, baños de taza y limpios, camas blandas, bar/restaurante... Está justo en el centro, al lado del metro y de la famosa calle Nanjing. Todo por 35元 por noche y persona. Hay una familia de gatitos blancos guapísimos, con ojitos azules y que no tendrán más de 2 semanas.
Dejamos las mochilas en el albergue y salimos a conocer la ciudad. Seguimos toda la calle Nanjing hasta el Bund. Es impresionante el número de rascacielos que tiene la ciudad por todas partes. La calle es comercial por completo. Termina un centro comercial y empieza otro. Tiendas de marca, ropa, joyerías, tecnología, souvenirs e imitaciones. Muchos chinos se acercan con un muestrario de relojes, bolsos, iPods...Samu va buscando un iPhone, así que acompaña a uno de estos vendedores a la trastienda de una tienda de trajes chinos. Yo me quedo fuera por si acaso no vuelven a salir y es necesario ir a buscar ayuda, jejejeje. Al rato aparecen sin nada. Todo son imitaciones malas. Nada que merezca la pena.
Llegamos al Bund.
Está todo levantado por las obras que están haciendo en la ciudad de cara a la Expo del 2010. Aún así han dejado acceso al paseo del rio para poder ver el Skyline. Hay edificios de todos los tamaños, formas y colores. Todos con pantallas de televisión descomunales. Por la noche debe ser impresionante el despliegue de luces que debe tener, visto lo que les gusta a los chinos iluminar todos los edificios y carteles de publicidad. Comemos en un pequeño restaurante en el que toda la comida pica (159元). Al parecer lo más destacable es el baño del local. Samu le llama "la acequia", está en el fondo, atravesando la cocina, en una especie de cuadra con un surco excavado en el suelo por el que fluyen líquidos y sólidos. Gracias a Dios no hay fotos de eso.
16:30h: Cogemos el metro (3元) para cruzar al otro lado del Bund.
Desde allí las torres parecen interminables. Queremos subir a alguna de las que dicen ser las más altas. La Lonely sólo trae referencia de una de ellas porque "el abridor" no estaba terminado cuando la escribieron. Ahora, esta última está entre las 2 más altas del mundo.
Vamos a la que indica la guía, porque cuentan un truco para evitar pagar los 88元 que cuesta subir a la planta 88. Las últimas plantas pertenecen a un hotel de superlujo. Se puede llegar hasta el bar en la planta 87, gratis. Allá que vamos, con nuestras pintas de mochileros, a colarnos en el hotelazo. En todas las plantas hay una persona que te recibe al salir del ascensor y te indica cómo llegar al siguiente. Las paredes son doradas, con madera, los suelos con alfombras, esculturas, cuadros...
Al llegar a la planta 85, el ascensor te provoca que se taponen los oidos.. Hay que cambiar de ascensor para subir las dos últimas plantas, y al salir al pasillo, alucinamos con lo que vemos.. un gran agujero inmenso de 85 plantas que al mirarlo desde arriba hace una forma de espiral dorada preciosa.
Terminamos de subir, llegamos al super bar y nos encontramos con un recepcionista... Parece que no hay forma de librarse del pago en esta torre para ver las vistas. En la carta los precios son acordes con el sitio, y lo más barato es un helado de 2 bolas por 50元. Samu y yo compartimos uno, el resto piden helados y cerveza(70元).
Para describir las vistas mejor ver las fotos desde el bar.
Al llegar éramos los únicos que estábamos en el bar, pero al rato empiezan a llegar más grupos de mochileros, utilizando el mismo truco que nosotros para no pagar. A todos nos ponen en la misma zona, lejos de la gente pudiente, y nos dan un cuenco de cacahuetes rebozados picantes.
Está empezando a oscurecer y decidimos bajar para ver el Bund iluminado. Al pasar por la torre del "abridor" vemos que se puede subir hasta arriba por 150元.Julio y César suben para hacer fotos. Los demás nos damos un paseo entre los rascacielos. Vamos a ver "La perla de Oriente". El repetidor de TV con forma de nave espacial de color fucsia. Un horror, pero llamativa.
Los edificios empiezan a iluminarse y a moverse!! Todos tienen algún tipo de "baile" de luces y viedo pantallas gigantes.
Al bajar, los Dalton nos cuentan la experiencia. Merece la pena ya que las vistas son espectaculares. Pero lo mejor es el baño. Si, si, el baño! Como es de libre acceso, allá que vamos!! Resulta ser el baño del siglo XXII. Es una taza caliente con un mando de opciones para regular la temperatura, tipos de lavado, chorro frontal, trasero, en círculos, regulador de presión y temperatura del agua, y tiempo del programa completo. Todo un descubrimiento para nosotros.
Visto el baño, cogemos el metro (3元) para cruzar al Bund y ver el skyline de noche. Increible el gasto de energía de esta gente. Y qué decir de la contaminación lumínica que genera. Hasta los barcos tienen lucecitas. Esta ciudad se transforma de noche.
Ah! Comentar que nos han intentado timar una pareja de chinos, bien vestidos y con cara de buena gente, que decían que habían perdido la cartera y necesitaban dinero para el taxi. Menos mal que antes lo han intentado con Ana y Joan, y nos avisan de la treta, porque estábamos a punto de darles algo.
21:30h: Se nos ha hecho un poco tarde y tenemos que cenar. Hoy elige Joan, por la del subway del otro día. Vamos a un chino donde están casi cerrando y no hay nadie más cenando.
Nos sirven y mientras comemos, aparecen gatos por la sala, los cocineros recogiendo las verduras y dejándolas en bolsas en la puerta, el que parece el dueño aparece con un Tchao Tchao blanco y lo sube a una mesa del restaurante. El perro allí se tumba, come, ladra...En fin, de no creer!! La cena sale por algo menos de 300元. En el albergue hay mucha animación siempre que llegamos de noche, pero estamos tan reventados que vamos directos a la cama. Y mientras mi picadura sigue creciendo!!
Zzz Zzz..
miércoles, 13 de mayo de 2009
MIÉRCOLES 13/05/09: HANGZHOU - SUZHOU
7:00h: Arriba que hay que coger un bus a Suzhou. Cogemos un taxi que nos lleva a la estación (41元). Compramos desayuno (47元)
9:00h: Tenemos los billetes para Suzhou (69元 cada uno). Montamos en el bus y caemos todos fritos.
12:00h: Ya hemos llegado. Cogemos una furgo por 50元 que nos lleva al albergue Suzhou Youth Hostel. Nos dan 2 habitaciones de literas a 35元 cada uno. Este albergue es mucho más cutre que el anterior, pero tiene Internet y está en el centro.
Alquilamos unas bicis por 300元 cada uno de depósito y 15元 más, cada uno, por el alquiler del día.
13:00h: Paramos a comer en un restaurante que nos pilla cerca y que está recomendado en la Lonely Planet por sus dumplings. Comemos muuuucho y muy rico por 408元.
16:00h:En bici nos acercamos hasta los canales para dar un paseo en barca (80元) con un gondolero que en lugar de cantar "O soleee miiiooo" nos deleita con un cantar chino.
La verdad es que estos canales no tienen ningún atractivo (Mucho mejores los que veremos después). Además al salir, aún estando enfrente de los jardines más famosos de todo Suzhou, no hemos llegado a tiempo y han cerrado.
Nos vamos a ver la pagoda (25元 cada uno), desde la que hay buenas vistas de la ciudad. En el último piso, la columna central, está rodeada de una malla, que permite que los debotos puedan dejar limosnas en la columna. Julio y César, se ponen a mover la malla y empiezan a caer monedas. Cuando llegan abajo, se sienten un poco culpables de haber cogido "dinero sagrado", jejejejeje y para resarcirse, le dan una limosna a un chino jorobado que está pidiendo en la puerta.
Cogemos las bicis y vamos en busca de un barrio típico. Después de cruzar por callejones con puestos ambulantes, circular entre mucha gente en calles estrechas.. llegamos de casualidad a una especie de islote de casitas típicas bien conservadas. Un canal recorre esta zona. Estos si que son bonitos para pasearlos en barca!! Como está empezando a anochecer, podemos ver la transformación del ambiente. Gradualmente se van encendiendo luces, hasta quedar todo iluminado por farolillos y guirnaldas de luz. Chulísimo!!! En el interior de la isla sólo hay tiendas y restaurantes.
De vuelta al albergue, paramos a cenar en un Subway, unos bocadillos gigantes (350元). Ya en el albergue, Internet, billar y Zzz Zzz.
9:00h: Tenemos los billetes para Suzhou (69元 cada uno). Montamos en el bus y caemos todos fritos.
12:00h: Ya hemos llegado. Cogemos una furgo por 50元 que nos lleva al albergue Suzhou Youth Hostel. Nos dan 2 habitaciones de literas a 35元 cada uno. Este albergue es mucho más cutre que el anterior, pero tiene Internet y está en el centro.
Alquilamos unas bicis por 300元 cada uno de depósito y 15元 más, cada uno, por el alquiler del día.
13:00h: Paramos a comer en un restaurante que nos pilla cerca y que está recomendado en la Lonely Planet por sus dumplings. Comemos muuuucho y muy rico por 408元.
16:00h:En bici nos acercamos hasta los canales para dar un paseo en barca (80元) con un gondolero que en lugar de cantar "O soleee miiiooo" nos deleita con un cantar chino.
La verdad es que estos canales no tienen ningún atractivo (Mucho mejores los que veremos después). Además al salir, aún estando enfrente de los jardines más famosos de todo Suzhou, no hemos llegado a tiempo y han cerrado.
Nos vamos a ver la pagoda (25元 cada uno), desde la que hay buenas vistas de la ciudad. En el último piso, la columna central, está rodeada de una malla, que permite que los debotos puedan dejar limosnas en la columna. Julio y César, se ponen a mover la malla y empiezan a caer monedas. Cuando llegan abajo, se sienten un poco culpables de haber cogido "dinero sagrado", jejejejeje y para resarcirse, le dan una limosna a un chino jorobado que está pidiendo en la puerta.
Cogemos las bicis y vamos en busca de un barrio típico. Después de cruzar por callejones con puestos ambulantes, circular entre mucha gente en calles estrechas.. llegamos de casualidad a una especie de islote de casitas típicas bien conservadas. Un canal recorre esta zona. Estos si que son bonitos para pasearlos en barca!! Como está empezando a anochecer, podemos ver la transformación del ambiente. Gradualmente se van encendiendo luces, hasta quedar todo iluminado por farolillos y guirnaldas de luz. Chulísimo!!! En el interior de la isla sólo hay tiendas y restaurantes.
De vuelta al albergue, paramos a cenar en un Subway, unos bocadillos gigantes (350元). Ya en el albergue, Internet, billar y Zzz Zzz.
martes, 12 de mayo de 2009
MARTES 12/05/09: HANGZHOU
7:00h: Arriba! que toca buscar alojamiento para hoy y visitar la ciudad. A estas horas, y aunque está nublado, ya hace mucho calor. Resulta que el resto de albergues están todos llenos, así que tenemos que quedarnos en este, pero cambiando de habitaciones, algo más caras (80元 cada una). Merece la pena, porque nos toca habitación doble abuardillada, con un baño grande y moderno.
Nos vamos al centro en bus (2元 cada billete) y buscamos un sitio para desayunar. Pasamos por delante de un restaurante en el que están cocinando porras y una especie de crepes. Allá que vamos!! Pedimos la leche de soja, unos crepes y unas porras. Todo muy rico y barato (53元)
Ahora toca encontrar bicis. En todas partes hay puestos de bicis municipales, pero es necesario sacar una tarjeta, así que no es buena opción para un solo día. En un albergue nos indican donde alquilar por 300元 cada uno de depósito y 20元 más, cada uno, por el alquiler del día.
Nos ponemos en marcha. La ciudad parece bastante llana, por lo que la ruta será bastante tranquila. Vamos bordeando el lago. Es una pena que haya tanta humedad en el ambiente, porque se forma como una neblina que no deja distinguir la otra orilla.
Encontramos una zona con un puente y un porche, que está lleno de parejas de novios esperando cola para hacerse las fotos de la boda, con sus típicas poses dramáticas y peliculeras.
Seguimos camino hasta la pagoda, pero no llegamos a entrar. Ya hemos visto unas cuantas y son todas iguales.
11:30h: Decidimos ir a visitar el museo de la medicina natural tradicional china (5元 cada uno con DNI). Se encuentra entre el mercadillo de la comida y la calle de los souvenirs. Está en una casa antigua, y enseña la evolución de la medicina china, los procesos de fabricación y los ingredientes utilizados, desde minerales, raices y plantas, hasta animales secos, bichos o partes de otros animales (ojos, cuernos, huesos..).
Es curioso. Al terminar hay unas estancias antiguas donde están las farmacias tradicionales. La gente mayor va con una especie de recetas, y los boticarios les preparan allí mismo las plantas que necesitan.
También se pueden comprar raices al peso. Tienen dentro de un expositor, una raiz de ginseng que cuesta 600.000元!! Si, si, unos 60.000€ o lo que es lo mismo, 10 millones de las antiguas pesetazas.
Salimos a la calle del mercadillo, está llena de tiendas de souvenirs. Comemos en el mercadillo de la comida que atraviesa esta calle. Son puestecitos de comida rápida china, para picar algo. Probamos el típico pollo del mendigo y otros platos para llevar(150元)
Por la tarde seguimos rodeando el lago con las bicis. Empieza a hacer frio y se pone a llover. Buscamos un sitio para cenar.
Nos encontramos un restaurante hasta la bandera de chinos, en el que hacen una especie de fondue con caldo, al que se le va añadiendo carne, verduras, pasta.. Está muy rico, y el caldito caliente nos viene bien (152元) Dejamos las bicis y volvemos a coger el bus para volver al albergue (2元).
Zzz Zzz
Nos vamos al centro en bus (2元 cada billete) y buscamos un sitio para desayunar. Pasamos por delante de un restaurante en el que están cocinando porras y una especie de crepes. Allá que vamos!! Pedimos la leche de soja, unos crepes y unas porras. Todo muy rico y barato (53元)
Ahora toca encontrar bicis. En todas partes hay puestos de bicis municipales, pero es necesario sacar una tarjeta, así que no es buena opción para un solo día. En un albergue nos indican donde alquilar por 300元 cada uno de depósito y 20元 más, cada uno, por el alquiler del día.
Nos ponemos en marcha. La ciudad parece bastante llana, por lo que la ruta será bastante tranquila. Vamos bordeando el lago. Es una pena que haya tanta humedad en el ambiente, porque se forma como una neblina que no deja distinguir la otra orilla.
Encontramos una zona con un puente y un porche, que está lleno de parejas de novios esperando cola para hacerse las fotos de la boda, con sus típicas poses dramáticas y peliculeras.
Seguimos camino hasta la pagoda, pero no llegamos a entrar. Ya hemos visto unas cuantas y son todas iguales.
11:30h: Decidimos ir a visitar el museo de la medicina natural tradicional china (5元 cada uno con DNI). Se encuentra entre el mercadillo de la comida y la calle de los souvenirs. Está en una casa antigua, y enseña la evolución de la medicina china, los procesos de fabricación y los ingredientes utilizados, desde minerales, raices y plantas, hasta animales secos, bichos o partes de otros animales (ojos, cuernos, huesos..).
Es curioso. Al terminar hay unas estancias antiguas donde están las farmacias tradicionales. La gente mayor va con una especie de recetas, y los boticarios les preparan allí mismo las plantas que necesitan.
También se pueden comprar raices al peso. Tienen dentro de un expositor, una raiz de ginseng que cuesta 600.000元!! Si, si, unos 60.000€ o lo que es lo mismo, 10 millones de las antiguas pesetazas.
Salimos a la calle del mercadillo, está llena de tiendas de souvenirs. Comemos en el mercadillo de la comida que atraviesa esta calle. Son puestecitos de comida rápida china, para picar algo. Probamos el típico pollo del mendigo y otros platos para llevar(150元)
Por la tarde seguimos rodeando el lago con las bicis. Empieza a hacer frio y se pone a llover. Buscamos un sitio para cenar.
Nos encontramos un restaurante hasta la bandera de chinos, en el que hacen una especie de fondue con caldo, al que se le va añadiendo carne, verduras, pasta.. Está muy rico, y el caldito caliente nos viene bien (152元) Dejamos las bicis y volvemos a coger el bus para volver al albergue (2元).
Zzz Zzz
lunes, 11 de mayo de 2009
LUNES 11/05/09: TANKOU - HANGZHOU
8:00h: Me despierto porque ya no tengo sueño y además tengo las piernas destrozadas por las agujetas. En la tele están poniendo clases de Tai Chi, danza del vientre, kick boxing, bailes de salón y coreografías tradicionales con pañuelos y abanicos. Oigo a estos que salen a dar una vuelta. Al rato vuelven y les oigo planear algo. Parece que quieren ir a ver los pueblos. Al poco salen con todo el equipaje y hacen el checkout. Han vuelto a largarse por su cuenta y sin avisar. No tuvieron bastante con lo de ayer...
12:00h: Ana, Samu y yo salimos del hotel y vamos a dejar las mochilas al señor Cheng. Le preguntamos por algo para ver por aquí antes de coger el bus a Hangzhou. Nos saca un folleto del parque Jiulong, con cascadas donde rodaron parte de la película Tigre y Dragón. Nos ofrece una furgo para los 3 ida y vuelta por 50元. La entrada al parque son 25元 con DNI y 50元 sin él.
La verdad es que el entorno es precioso. Un valle con las colinas verdes, llenas de bambú y en el centro el cauce rocoso del rio con pozas y cascadas. Todo muy bucólico y muy bien conservado.
14:00h: Empiezo a oir una música muy alta y como un ruido de motor. Algo fuera de lugar en ese lugar. De repente, algo rojo, con lazos azules, nos pasa por encima de la cabeza. Es un tio en una moto, pasando por un cable de equilibrista sobre el valle!! Es todo un espectáculo.
Volvemos a Tankou con mejor sabor de boca que el de ayer. Las "Cascadas de los 9 Dragones" es un lugar digno de visitar. Si no es viniendo aquí, al menos por Internet (www.jiulongpu.com), aunque nunca será lo mismo.
15:30h: Comemos en casa de Mr.Cheng (82元). Aprovechamos que habla chino, para que nos reserve el albergue en Hangzhou, puesto que vamos a llegar bastante tarde, y no es plan de quedarse sin alojamiento.
16:30h: Cogemos el bus a Hangzhou(100元 cada uno). Es un autobús muy moderno, con sitio de sobra y AC. El trayecto dura unas 3h30'.
20:00h: Ya estamos en Hangzhou. Esto es bastante chocante. Todos pensábamos que nos íbamos a encontrar con un pueblecito alrededor de un lago, y resulta que estamos en la ciudad más pija por el momento. Aunque es de noche, podemos apreciar el famoso lago del Oeste, inmenso. Las calles están todas arboladas, hay muchas tiendas de ropa de marca, joyerías, centros comerciales, concesionarios de Bentley, Mercedes, Porsche, Ferrari, Maseratti.. muchos restaurantes de comida internacional con muy buena decoración, hoteles de lujo, coches importados circulando... Hasta la gente parece diferente. Van vestidos de manera más europea y acordes a la temperatura que hace. Igual estamos a 24º con sensación de humedad en el ambiente.
Cogemos un taxi desde el centro hasta el albergue Tour'An Youth Hostel (16元). El alojamiento está bien: habitación con 6 literas y baño incorporado por 35元 cada uno por noche. También tenemos Internet y sala de juegos.
Preguntamos por la manera de ir a Suzhou mañana, ya que nuestra idea es quedarnos aquí sólo una noche. Al parecer hay autobuses cada hora que tardan 3 horas, pero sólo hasta las 17:30h, por lo que nos obliga a hacer otra noche aquí.
Salimos a cenar a un restaurante donde tú eliges el pescado que quieres comer, pescándolo de una pecera (387元). Volvemos en taxi (20元)
12:00h: Ana, Samu y yo salimos del hotel y vamos a dejar las mochilas al señor Cheng. Le preguntamos por algo para ver por aquí antes de coger el bus a Hangzhou. Nos saca un folleto del parque Jiulong, con cascadas donde rodaron parte de la película Tigre y Dragón. Nos ofrece una furgo para los 3 ida y vuelta por 50元. La entrada al parque son 25元 con DNI y 50元 sin él.
La verdad es que el entorno es precioso. Un valle con las colinas verdes, llenas de bambú y en el centro el cauce rocoso del rio con pozas y cascadas. Todo muy bucólico y muy bien conservado.
14:00h: Empiezo a oir una música muy alta y como un ruido de motor. Algo fuera de lugar en ese lugar. De repente, algo rojo, con lazos azules, nos pasa por encima de la cabeza. Es un tio en una moto, pasando por un cable de equilibrista sobre el valle!! Es todo un espectáculo.
Volvemos a Tankou con mejor sabor de boca que el de ayer. Las "Cascadas de los 9 Dragones" es un lugar digno de visitar. Si no es viniendo aquí, al menos por Internet (www.jiulongpu.com), aunque nunca será lo mismo.
15:30h: Comemos en casa de Mr.Cheng (82元). Aprovechamos que habla chino, para que nos reserve el albergue en Hangzhou, puesto que vamos a llegar bastante tarde, y no es plan de quedarse sin alojamiento.
16:30h: Cogemos el bus a Hangzhou(100元 cada uno). Es un autobús muy moderno, con sitio de sobra y AC. El trayecto dura unas 3h30'.
20:00h: Ya estamos en Hangzhou. Esto es bastante chocante. Todos pensábamos que nos íbamos a encontrar con un pueblecito alrededor de un lago, y resulta que estamos en la ciudad más pija por el momento. Aunque es de noche, podemos apreciar el famoso lago del Oeste, inmenso. Las calles están todas arboladas, hay muchas tiendas de ropa de marca, joyerías, centros comerciales, concesionarios de Bentley, Mercedes, Porsche, Ferrari, Maseratti.. muchos restaurantes de comida internacional con muy buena decoración, hoteles de lujo, coches importados circulando... Hasta la gente parece diferente. Van vestidos de manera más europea y acordes a la temperatura que hace. Igual estamos a 24º con sensación de humedad en el ambiente.
Cogemos un taxi desde el centro hasta el albergue Tour'An Youth Hostel (16元). El alojamiento está bien: habitación con 6 literas y baño incorporado por 35元 cada uno por noche. También tenemos Internet y sala de juegos.
Preguntamos por la manera de ir a Suzhou mañana, ya que nuestra idea es quedarnos aquí sólo una noche. Al parecer hay autobuses cada hora que tardan 3 horas, pero sólo hasta las 17:30h, por lo que nos obliga a hacer otra noche aquí.
Salimos a cenar a un restaurante donde tú eliges el pescado que quieres comer, pescándolo de una pecera (387元). Volvemos en taxi (20元)
domingo, 10 de mayo de 2009
DOMINGO 10/05/09: TUNXI - TANKOU
5:00h:Ale, ni ha amanecido y ya nos sacan del tren al llegar a Tunxi. Creemos que a esa hora no va a haber nadie en la calle, pero una vez más estos chinos nos sorprenden. Allí están taxistas, conductores de bus, de furgoneta, vendedores de mapas turísticos...
Enseguida nos capta un conductor de minibus. Dice que nos lleva a Tankou por 15元 cada uno. No miramos más opciones, pero seguro que el autobús era más barato. Primero nos meten en uno para nosotros solos, avanza unos metros, nos hacen bajar y nos suben a otro lleno de chinos. Menudo morro tienen. En fin.. para qué discutir.. lo que queremos es llegar.
Una china, coge el micro y no calla hasta el final del viaje. Como no entendemos nada, no sabemos si es una guía turística o está contando chistes de Eugenio, aún así, nos dormimos durante el viaje para no oirla.
Al llegar, nos enteramos que no estamos en Tankou, si no en el pueblo anterior. Allí aparece un chino que se hace llamar Mr. Cheng, y que por lo visto aparece recomendado en la Lonely Planet. El tio tiene un inglés de Oxford impecable, aunque él diga que es autodidacta. El caso es que todo parece amañado para que nos encontrásemos con él, nos lleve a su restaurante y nos empiece a vender alojamiento, transporte, taxis, visitas y comidas. Nos vemos tan apabullados que no tenemos tiempo ni de reaccionar y ya nos ha clavado 160元 por el desayuno continental, más 50元 cada taxi para subir a la entrada de la montaña, más 600元 del total de los billetes de bus a Hangzhou, nuestro próximo destino.
Le dejamos las mochilas en el restaurante y nos vamos camino de la montaña. Al llegar nos cobran 115元 a cada uno por entrar al parque natural de Huang Shan (o montaña amarilla). Y eso que han colado los DNIs, si no hubiesen sido 230元.
Julio, César y Joan, suben andando por las ruta de las escaleras del Este (1h30'). Ana, Samu y yo nos vamos al teleférico nuevo (80元 cada viaje con DNI), que en 5' te sube hasta arriba, mientras puedes ir contemplando las vistas del valle de pinos sombrilla y bambú.
Al entrar al teleférico, vuelven a pedirnos los carnets de estudiante, pero desconfían y no quieren dejarnos pasar. Dicen que no son internacionales y que no aparece el nombre de la Universidad. Cogemos el DNI y le señalamos la línea donde vienen los nombres de los padres, y les decimos "This is the name of the University". Y ves al chino leyendo: "University Francisco Diego y Francisca". Jajajajajaja. Nos costaba aguantarnos la risa en ese momento, pero al final coló. Sin embargo a Ana le hicieron pagar el billete completo (195元).
Una vez arriba, encontramos al resto y empezamos la ruta de bajada por las escaleras del Oeste. Es un sitio curioso, hay miles de chinos de visita, pequeños, mayores.. todos subiendo y bajando por las miles de escaleras que se han construido en el parque.
Al llegar a una bifurcación, Julio, César y Joan eligen el camino largo y nosotros el corto. Tienen ganas de seguir con el trekking y nos separamos. Quedamos en vernos en casa de Mr. Cheng.
17:30h: Después de 3h30' y 20.000 escalones de bajada en nuestras piernas (es cierto), llegamos reventados al final. Acordamos un taxi para los tres por 40元. Hablamos con Mr. Cheng para encontrar alojamiento. Nos ofrece uno "económico" por 80元 la noche/habitación. Resulta ser un hotel muy apañado, limpio, con kit de bienvenida (papel, jabón, cepillos..), dos camas semi-blandas, TV y baño incorporado con taza y bañera. El único inconveniente es que sólo tiene agua caliente a partir de las 19:00h. Y es que después de dos días sin ducharnos y con unas sudadas de espanto, estamos deseando coger la ducha.
20:30h: Los Dalton y el coordinador siguen sin aparecer. Mr. Cheng empieza a ponerse un poco nervioso, porque a las 21:00 tiene que cerrar y tenemos allí las mochilas, quiere que cenemos allí, hablar de la excursión de mañana a los pueblos, hacer el checkin en el hotel, etc...
Al explicarle a Mr.Cheng la ruta que cogieron, nos dice que es la más escabrosa y que es muy fácil perderse y aparecer en la otra punta del parque, desde la que para volver hay que recorrer 140km para llegar a Tankou. Para que el hombre se tranquilice un poco, pedimos algo de cenar, mientras él sale a buscarles por si estuviesen en otro restaurante del pueblo.
21:30h: Aparece César montado en una scooter con un chino, y el resto en la moto del señor Cheng. Se sentaron a cenar y nos contaron la historia de lo ocurrido....
Efectivamente, se fueron por una ruta que no utilizaba nadie y que daba a la puerta Oeste del parque. Tuvieron que andar por una autopista desierta durante 5km hasta que encontraron una pequeña casa. Intentaron hacerse entender para que les pidieran un taxi, pero les trajeron un autobús sólo para ellos que quería cobrarles 800元 por llevarles a Tankou. Como no pensaban que estuvieran tan lejos, les parece demasiado caro y negocian llevarles al siguiente pueblo por 100元.
El autobús les deja en el pueblo, en la casa de algún familiar que quiere prepararles la cena. Como aquello no pinta muy bien, se van de la casa hacia el pueblo y encuentran una tienda desde la que llamar. Pero justo en ese momento pasa un taxi y salen corriendo tras él. Después de 140km y 200元 menos, consiguen llegar a Tankou.
La verdad es que hemos estado muy preocupados por si les había pasado algo y se les había hecho de noche en el parque. Sin embargo ellos llegan tan alegres, cachondeándose de la experiencia. Joan dice que para él ha sido el mejor día de todo el viaje, mientras se rie y dice: "qué de puta madre tiooo"... en fin...Volvemos al hotel y a dormir. Mañana me apetece quedarme descansando, y paso de ir a ver pueblos a 80元 cada uno. Esta región es un sacadineros terrible...
Enseguida nos capta un conductor de minibus. Dice que nos lleva a Tankou por 15元 cada uno. No miramos más opciones, pero seguro que el autobús era más barato. Primero nos meten en uno para nosotros solos, avanza unos metros, nos hacen bajar y nos suben a otro lleno de chinos. Menudo morro tienen. En fin.. para qué discutir.. lo que queremos es llegar.
Una china, coge el micro y no calla hasta el final del viaje. Como no entendemos nada, no sabemos si es una guía turística o está contando chistes de Eugenio, aún así, nos dormimos durante el viaje para no oirla.
Al llegar, nos enteramos que no estamos en Tankou, si no en el pueblo anterior. Allí aparece un chino que se hace llamar Mr. Cheng, y que por lo visto aparece recomendado en la Lonely Planet. El tio tiene un inglés de Oxford impecable, aunque él diga que es autodidacta. El caso es que todo parece amañado para que nos encontrásemos con él, nos lleve a su restaurante y nos empiece a vender alojamiento, transporte, taxis, visitas y comidas. Nos vemos tan apabullados que no tenemos tiempo ni de reaccionar y ya nos ha clavado 160元 por el desayuno continental, más 50元 cada taxi para subir a la entrada de la montaña, más 600元 del total de los billetes de bus a Hangzhou, nuestro próximo destino.
Le dejamos las mochilas en el restaurante y nos vamos camino de la montaña. Al llegar nos cobran 115元 a cada uno por entrar al parque natural de Huang Shan (o montaña amarilla). Y eso que han colado los DNIs, si no hubiesen sido 230元.
Julio, César y Joan, suben andando por las ruta de las escaleras del Este (1h30'). Ana, Samu y yo nos vamos al teleférico nuevo (80元 cada viaje con DNI), que en 5' te sube hasta arriba, mientras puedes ir contemplando las vistas del valle de pinos sombrilla y bambú.
Al entrar al teleférico, vuelven a pedirnos los carnets de estudiante, pero desconfían y no quieren dejarnos pasar. Dicen que no son internacionales y que no aparece el nombre de la Universidad. Cogemos el DNI y le señalamos la línea donde vienen los nombres de los padres, y les decimos "This is the name of the University". Y ves al chino leyendo: "University Francisco Diego y Francisca". Jajajajajaja. Nos costaba aguantarnos la risa en ese momento, pero al final coló. Sin embargo a Ana le hicieron pagar el billete completo (195元).
Una vez arriba, encontramos al resto y empezamos la ruta de bajada por las escaleras del Oeste. Es un sitio curioso, hay miles de chinos de visita, pequeños, mayores.. todos subiendo y bajando por las miles de escaleras que se han construido en el parque.
Al llegar a una bifurcación, Julio, César y Joan eligen el camino largo y nosotros el corto. Tienen ganas de seguir con el trekking y nos separamos. Quedamos en vernos en casa de Mr. Cheng.
17:30h: Después de 3h30' y 20.000 escalones de bajada en nuestras piernas (es cierto), llegamos reventados al final. Acordamos un taxi para los tres por 40元. Hablamos con Mr. Cheng para encontrar alojamiento. Nos ofrece uno "económico" por 80元 la noche/habitación. Resulta ser un hotel muy apañado, limpio, con kit de bienvenida (papel, jabón, cepillos..), dos camas semi-blandas, TV y baño incorporado con taza y bañera. El único inconveniente es que sólo tiene agua caliente a partir de las 19:00h. Y es que después de dos días sin ducharnos y con unas sudadas de espanto, estamos deseando coger la ducha.
20:30h: Los Dalton y el coordinador siguen sin aparecer. Mr. Cheng empieza a ponerse un poco nervioso, porque a las 21:00 tiene que cerrar y tenemos allí las mochilas, quiere que cenemos allí, hablar de la excursión de mañana a los pueblos, hacer el checkin en el hotel, etc...
Al explicarle a Mr.Cheng la ruta que cogieron, nos dice que es la más escabrosa y que es muy fácil perderse y aparecer en la otra punta del parque, desde la que para volver hay que recorrer 140km para llegar a Tankou. Para que el hombre se tranquilice un poco, pedimos algo de cenar, mientras él sale a buscarles por si estuviesen en otro restaurante del pueblo.
21:30h: Aparece César montado en una scooter con un chino, y el resto en la moto del señor Cheng. Se sentaron a cenar y nos contaron la historia de lo ocurrido....
Efectivamente, se fueron por una ruta que no utilizaba nadie y que daba a la puerta Oeste del parque. Tuvieron que andar por una autopista desierta durante 5km hasta que encontraron una pequeña casa. Intentaron hacerse entender para que les pidieran un taxi, pero les trajeron un autobús sólo para ellos que quería cobrarles 800元 por llevarles a Tankou. Como no pensaban que estuvieran tan lejos, les parece demasiado caro y negocian llevarles al siguiente pueblo por 100元.
El autobús les deja en el pueblo, en la casa de algún familiar que quiere prepararles la cena. Como aquello no pinta muy bien, se van de la casa hacia el pueblo y encuentran una tienda desde la que llamar. Pero justo en ese momento pasa un taxi y salen corriendo tras él. Después de 140km y 200元 menos, consiguen llegar a Tankou.
La verdad es que hemos estado muy preocupados por si les había pasado algo y se les había hecho de noche en el parque. Sin embargo ellos llegan tan alegres, cachondeándose de la experiencia. Joan dice que para él ha sido el mejor día de todo el viaje, mientras se rie y dice: "qué de puta madre tiooo"... en fin...Volvemos al hotel y a dormir. Mañana me apetece quedarme descansando, y paso de ir a ver pueblos a 80元 cada uno. Esta región es un sacadineros terrible...
sábado, 9 de mayo de 2009
SÁBADO 09/05/2009: NANJING
07:00h: Ya llevan los chinos metiendo voces más de una hora. Todos están desayunando los mismos cubos de fideos de la cena. Seguimos en el tren. El paisaje ha cambiado. Ahora es más verde, se ven campos labrados, con riachuelos.
Tenemos a un bebé chino en el compartimento de al lado, que no tendrá ni un añito y ya anda él solo, y con las manos juntas a la espalda, como una persona mayor. Que gracioso! En uno de sus paseos se ha hecho pipí y popó en el pasillo del tren, y tiene al abuelo con la fregona en la mano todo el trayecto.
11:00h: 18 horas en el tren!!! Ggrrrr, que hartura!! aunque casi todas han sido durmiendo, es un viaje que cansa. Dejamos las mochilas en la consigna de la estación (6元 cada una) y cogemos el metro para ir al centro (2元 el billete).
Es el primer metro que cogemos en China y tenemos curiosidad de ver si es como en la tele. Con todos esos chinos agolpados en el andén y apretujados dentro del vagón. Los billetes del metro son como una moneda de plástico, tipo ficha de los coches de choque, que se pasa por un detector y debe tener algún componente electrónico dentro que hace que se abra la puerta. Al salir se echa por una ranura y te abre el paso. Los trenes son rápidos, parecidos a los de Madrid en tamaño, pero con pantallas de TV donde ponen canales reales de la tele. Está limpio y se prohibe explícitamente escupir en el suelo.
Bajamos en el centro. Todos los edificios son altísimos, con grandes pantallas de publicidad y con grandes centros comerciales. Hay toda una avenida de productos de electrónica (Sony, HP, Canon, Vaio...). No encontramos bicis para alquilar y encima nos hemos equivocado de dirección al echar a andar. Con el calor que hace y la contaminación que hay, no apetece nada andar, así que preguntamos cómo llegar al parque de Zhongshanlingyuan (o de la montaña púrpura). Nos recomiendan ir en taxi (16元).
13:00h: Una de las atracciones del parque, el Teleférico, está cerrado por avería, así que nos tocará andar. Estamos hambrientos después de la cena de fideos del tren, y lo único que hay en esa zona del parque es un chiringuito con botes de fideos!!! Así que otra vez nos toca comer lo mismo (67元)
14:30h:Antes de echar a andar, unas chicas alemanas nos ayudan a coger un autobús que nos dejará cerca del "Lago de las Nubes Púrpuras" y las tumbas Ming. Hasta el momento el parque no ha tenido ningún encanto, pero al bajar del autobús número 3 (1元 el billete), empiezan los paseos arbolados.
La entrada a la zona nos cuesta 70元 cada uno. Un precio bastante caro para lo que estamos acostumbrados, y mucho más para ser un parque!! No hay descuento posible. Vamos directos al lago, pasando de tumbas y templos. Lo único que queremos es tumbarnos a la sombra. Al llegar vemos un paisaje muy coqueto. Un lago rodeado de árboles, donde mucha gente está practicando natación, con gorrito y todo. Aunque hay carteles que prohiben el baño, Joan, Samu y César se meten al agua con ropa y todo. Ana y yo nos conformamos con meter los pies. El agua tiene una temperatura buenísima y nos calma un poco el calor.
Hacemos tiempo hasta ir a la estación de nuevo. Los chicos se han ido de excursión a un montecillo desde el que hay unas vistas de toda la ciudad. Por el camino han perdido a Samu, y después de un rato buscándole aparece bajando el montecillo. Mientras esperamos, a Ana y a mi nos da conversación en inglés un "bussiness man" chino que está nadando en el lago. También llega una niña a practicar el inglés que le han enseñado en el cole, y nos suelta una retaila de carrerilla de frases tipo: "My name is...", "My favorite color is yellow"...jajaja, mientras los padres la miran orgullosa y la empujan a que nos diga más cosas.
Nos cogemos otro bus al centro para ir a cenar (2元 cada billete). Cenamos en un restaurante un poco pijo por 380元. Volvemos en metro a la estación (2元) y cogemos un tren que nos lleva a Tunxi (102元 la litera de abajo(下)).
22:30h: Me doy una mini ducha en el lavabo mientras los chinos me miran con cara rara, pero es que llevamos dos días metidos en trenes, sudando, andando.. y se necesita un lavado, aunque sea de gato. Me pongo a escribir el resumen de la jornada hasta que apagan la luz del vagón. Un revisor, al verme escribiendo a la luz de las luces de emergencia, me trae una linternita para que tenga luz, y se sienta al lado mio hasta que termino, mirando cómo escribo. Voy a dormir ya, para que el hombre pueda terminar la ronda.
Zzz Zzz...
Tenemos a un bebé chino en el compartimento de al lado, que no tendrá ni un añito y ya anda él solo, y con las manos juntas a la espalda, como una persona mayor. Que gracioso! En uno de sus paseos se ha hecho pipí y popó en el pasillo del tren, y tiene al abuelo con la fregona en la mano todo el trayecto.
11:00h: 18 horas en el tren!!! Ggrrrr, que hartura!! aunque casi todas han sido durmiendo, es un viaje que cansa. Dejamos las mochilas en la consigna de la estación (6元 cada una) y cogemos el metro para ir al centro (2元 el billete).
Es el primer metro que cogemos en China y tenemos curiosidad de ver si es como en la tele. Con todos esos chinos agolpados en el andén y apretujados dentro del vagón. Los billetes del metro son como una moneda de plástico, tipo ficha de los coches de choque, que se pasa por un detector y debe tener algún componente electrónico dentro que hace que se abra la puerta. Al salir se echa por una ranura y te abre el paso. Los trenes son rápidos, parecidos a los de Madrid en tamaño, pero con pantallas de TV donde ponen canales reales de la tele. Está limpio y se prohibe explícitamente escupir en el suelo.
Bajamos en el centro. Todos los edificios son altísimos, con grandes pantallas de publicidad y con grandes centros comerciales. Hay toda una avenida de productos de electrónica (Sony, HP, Canon, Vaio...). No encontramos bicis para alquilar y encima nos hemos equivocado de dirección al echar a andar. Con el calor que hace y la contaminación que hay, no apetece nada andar, así que preguntamos cómo llegar al parque de Zhongshanlingyuan (o de la montaña púrpura). Nos recomiendan ir en taxi (16元).
13:00h: Una de las atracciones del parque, el Teleférico, está cerrado por avería, así que nos tocará andar. Estamos hambrientos después de la cena de fideos del tren, y lo único que hay en esa zona del parque es un chiringuito con botes de fideos!!! Así que otra vez nos toca comer lo mismo (67元)
14:30h:Antes de echar a andar, unas chicas alemanas nos ayudan a coger un autobús que nos dejará cerca del "Lago de las Nubes Púrpuras" y las tumbas Ming. Hasta el momento el parque no ha tenido ningún encanto, pero al bajar del autobús número 3 (1元 el billete), empiezan los paseos arbolados.
La entrada a la zona nos cuesta 70元 cada uno. Un precio bastante caro para lo que estamos acostumbrados, y mucho más para ser un parque!! No hay descuento posible. Vamos directos al lago, pasando de tumbas y templos. Lo único que queremos es tumbarnos a la sombra. Al llegar vemos un paisaje muy coqueto. Un lago rodeado de árboles, donde mucha gente está practicando natación, con gorrito y todo. Aunque hay carteles que prohiben el baño, Joan, Samu y César se meten al agua con ropa y todo. Ana y yo nos conformamos con meter los pies. El agua tiene una temperatura buenísima y nos calma un poco el calor.
Hacemos tiempo hasta ir a la estación de nuevo. Los chicos se han ido de excursión a un montecillo desde el que hay unas vistas de toda la ciudad. Por el camino han perdido a Samu, y después de un rato buscándole aparece bajando el montecillo. Mientras esperamos, a Ana y a mi nos da conversación en inglés un "bussiness man" chino que está nadando en el lago. También llega una niña a practicar el inglés que le han enseñado en el cole, y nos suelta una retaila de carrerilla de frases tipo: "My name is...", "My favorite color is yellow"...jajaja, mientras los padres la miran orgullosa y la empujan a que nos diga más cosas.
Nos cogemos otro bus al centro para ir a cenar (2元 cada billete). Cenamos en un restaurante un poco pijo por 380元. Volvemos en metro a la estación (2元) y cogemos un tren que nos lleva a Tunxi (102元 la litera de abajo(下)).
22:30h: Me doy una mini ducha en el lavabo mientras los chinos me miran con cara rara, pero es que llevamos dos días metidos en trenes, sudando, andando.. y se necesita un lavado, aunque sea de gato. Me pongo a escribir el resumen de la jornada hasta que apagan la luz del vagón. Un revisor, al verme escribiendo a la luz de las luces de emergencia, me trae una linternita para que tenga luz, y se sienta al lado mio hasta que termino, mirando cómo escribo. Voy a dormir ya, para que el hombre pueda terminar la ronda.
Zzz Zzz...
viernes, 8 de mayo de 2009
VIERNES 08/05/09: PINYAO - TAIYUAN - NANJING
9:00h: El señor Wok hoy se lo ha currado!! Té de tres clases, mini bollicaos, cacahuetes, pepino, huevos cocidos y una especie de rosquillas. Todo riquísimo. Le dejamos 20元 de propina y 60元 por el desayuno de hoy. Además nos ha conseguido billetes de tren a Taiyuan por 8元 cada uno, para las 12:15h.
Salimos a dar una última vuelta antes de irnos y visitamos el banco más antiguo de China.
11:30h: Llegamos a la estación con tiempo de sobra. Seguimos sin entender el funcionamiento de la espera. En el billete no pone vagón ni asiento, por lo que entendemos que nos tocará ir de pie. Se acerca la hora y la gente se va agolpando en la puerta.
12:30h: Hasta ahora no ha pasado ningún tren, ni han dejado entrar a nadie en los andenes. Con la llegada de este tren, los revisores dejan entrar a sólo unos pocos. Preocupados por si fuese nuestro tren, enseñamos a una revisora los billetes y nos contesta "fifteen". Esperamos que tenemos que esperar 15 minutos para poder entrar, pero el tren que ha llegado, arranca y se va. Empieza el mosqueo... Esperamos un poco y volvemos a preguntar. Parecen decirnos con gestos, que era el tren anterior. Mal rollito.... Empiezan a dejar entrar a otra tanda de pasajeros. Le volvemos a enseñar los billetes a la revisora, y esta vez nos dice que tenemos que esperar 1 hora!!! No entendemos nada. Al final Joan le enseña los billetes que tenemos de Taiyuan a Nanjing, para que la mujer vea, que necesitamos pasar o perderemos el otro tren. La revisora pone cara de susto y nos deja pasar a todos.
12:50h: Ya estamos en el tren. Aunque no tenemos asiento asignado, hemos conseguido sentarnos en lo que parece la clase bussines, y de momento nadie nos ha echado. A ver si hay suerte y llegamos así a Taiyuan.
14:30h: Pues hemos conseguido llegar en bussines class, jejeje. Como hay poco tiempo, comemos en el KFC que es lo que está más cerca de la estación (217元) y compramos la cena para el tren (59元). También compramos una baraja de poker por 2元.
16:50h: Cogemos el tren. Esta vez hemos tenido suerte y nos han tocado literas de abajo (274元 cada una) y de en medio (265元). El viaje de por si ya es largo, pero se hace todavía más ya que el tren va haciendo paradas de más de media hora, para que la gente salga a estirar las piernas o a comer en los puestos de comida que montan en los andenes. A este ritmo vamos a tardar 1000 horas en llegar. Gracias a los billetes hemos conseguido saber todos los símbolos que representan las posiciones de las literas: arriba(上) centro (中) y abajo (下).
Para pasar mejor el rato, nos entretenemos jugando a las cartas y con el niño de al lado. También hablamos del tema estrella.. El baño!!!
De cena tenemos los botes de noodles deshidratados típicos de los chinos. La pinta no es muy apetecible, pero quitan el hambre.
Zzz Zzz
Salimos a dar una última vuelta antes de irnos y visitamos el banco más antiguo de China.
11:30h: Llegamos a la estación con tiempo de sobra. Seguimos sin entender el funcionamiento de la espera. En el billete no pone vagón ni asiento, por lo que entendemos que nos tocará ir de pie. Se acerca la hora y la gente se va agolpando en la puerta.
12:30h: Hasta ahora no ha pasado ningún tren, ni han dejado entrar a nadie en los andenes. Con la llegada de este tren, los revisores dejan entrar a sólo unos pocos. Preocupados por si fuese nuestro tren, enseñamos a una revisora los billetes y nos contesta "fifteen". Esperamos que tenemos que esperar 15 minutos para poder entrar, pero el tren que ha llegado, arranca y se va. Empieza el mosqueo... Esperamos un poco y volvemos a preguntar. Parecen decirnos con gestos, que era el tren anterior. Mal rollito.... Empiezan a dejar entrar a otra tanda de pasajeros. Le volvemos a enseñar los billetes a la revisora, y esta vez nos dice que tenemos que esperar 1 hora!!! No entendemos nada. Al final Joan le enseña los billetes que tenemos de Taiyuan a Nanjing, para que la mujer vea, que necesitamos pasar o perderemos el otro tren. La revisora pone cara de susto y nos deja pasar a todos.
12:50h: Ya estamos en el tren. Aunque no tenemos asiento asignado, hemos conseguido sentarnos en lo que parece la clase bussines, y de momento nadie nos ha echado. A ver si hay suerte y llegamos así a Taiyuan.
14:30h: Pues hemos conseguido llegar en bussines class, jejeje. Como hay poco tiempo, comemos en el KFC que es lo que está más cerca de la estación (217元) y compramos la cena para el tren (59元). También compramos una baraja de poker por 2元.
16:50h: Cogemos el tren. Esta vez hemos tenido suerte y nos han tocado literas de abajo (274元 cada una) y de en medio (265元). El viaje de por si ya es largo, pero se hace todavía más ya que el tren va haciendo paradas de más de media hora, para que la gente salga a estirar las piernas o a comer en los puestos de comida que montan en los andenes. A este ritmo vamos a tardar 1000 horas en llegar. Gracias a los billetes hemos conseguido saber todos los símbolos que representan las posiciones de las literas: arriba(上) centro (中) y abajo (下).
Para pasar mejor el rato, nos entretenemos jugando a las cartas y con el niño de al lado. También hablamos del tema estrella.. El baño!!!
De cena tenemos los botes de noodles deshidratados típicos de los chinos. La pinta no es muy apetecible, pero quitan el hambre.
Zzz Zzz
jueves, 7 de mayo de 2009
JUEVES 07/05/09: PINYAO
8:30h: Menuda diferencia.. aquí amanece y puedes seguir durmiendo porque no tienes a 20 chinos gritando debajo de tu ventana. Aunque las camas son de las duras, conseguimos estar descansados, y recuperamos horas de sueño.
El baño consiste en un lavabo, taza (con agua limpiadora), un termo y la ducha, entre el lavabo y la taza, pero sin plato, con lo cual al ducharte el baño se llenaba de agua.
9:00h: A desayunar!!! El señor Wok se ha esmerado y nos ha preparado un super desayuno. Aunque a nosotros no termina de convencernos demasiado, agradecemos el esfuerzo. Tenemos sopa de arroz y sémola, bastante insípida, pepino agridulce, panecillos de masa de pan sin cocer, una especie de tiras de hojaldre horneado y un plato lleno de tofu.. Después del esmero del pobre hombre, hacemos lo que podemos para acabarnos lo máximo posible.
Le dejamos unas bolsas de ropa sucia para que nos haga la colada. Alquilamos unas bicis (7元 cada una) para todo el día y nos vamos camino de la estación de trenes a unos 2km fuera de la muralla. Queremos conseguir los billetes de tren de Nanjing a Tunxi, pero no hay suerte. Media vuelta.
Hoy nos dedicamos a ver las murallas, algunas casas típicas antiguas, templos y museos. Todos los edificios se organizan igual: dependiencias para dormir en los laterales, y templos en el centro y al final. Todos tienen exposiciones de los muebles de época. La única diferencia entre tanta mesa y silla, es que en el templo de Confucio, encontramos una sala muy curiosa. Es como un pequeño museo de los horrores, donde se explican las torturas que aplicaban las divinidades del infierno, mediante representaciones muy realistas y bastante dantescas.
14:30h: Paramos a comer en un restaurante con patio. Todo rico, menos la supuesta "sausage", que resulta ser tripa o algo raro de casquería (164元). Después de comer damos una vuelta por cerca de la muralla, pero hace bastante calor y Ana y yo nos vamos a que nos den un masaje.
17:30h: Durante una hora y por 66元 cada una, recibimos un masaje de todo el cuerpo, un poco doloroso, teniendo en cuenta que tenemos los músculos bastante cargados, pero a la vez relajante y tonificador. Mientras los chicos se van a Internet.
18:30h: Tenemos media hora para hacer unas compras. Ana compra un pack de hojas "antiguas" por 15元, y yo consigo el libro del arte de la guerra de Confucio, con una encuadernación muy bonita en bambú y seda por 100元.
19:00h: Ahora son los chicos los que han ido a darse un masaje de pies. Media hora por 30元 cada uno. Nosotras nos vamos a Internet. Nos sale gratis por consumir una coca-cola de 5元.
20:30h: Salimos fuera de la muralla a cenar algo en una terraza. Es como un buffet con cocina en directo, donde eliges lo que quieres, te lo cocinan allí mismo y te lo llevan a la mesa. Pedimos unas cazuelitas que te dan hirviendo con carne, noodles, verduras..unos caracolillos y unas brochetas. Todo por 117元. Nos acompañan la chica vasca y la chica colombiana que encontramos paseando por Pinyao.
22:15h: El señor Wok nos espera para recoger las bicis y llevarnos al hotel escondido. Hoy toca entrar por el restaurante. Al llegar vemos que nos ha recogido la ropa, la ha doblado y agrupado por categorías: pantalones, camisetas, ropa interior y calcetines. Este hombre es un encanto!!! Le agradecemos las molestias que se ha tomado y nos hacemos unas fotos con él y con su mujer.
Como nos da pena tener que volver a dejar parte del desayuno, intentamos explicarle que no nos pongan tofu ni pepino. Como la charla va para largo, yo me subo a la habitación, así que no sé qué se habrá conseguido. Mañana el desayuno será sorpresa...
Hoy en la tele están poniendo recetas de cocina con coca-cola. Estos chinos... Zzz Zzz
El baño consiste en un lavabo, taza (con agua limpiadora), un termo y la ducha, entre el lavabo y la taza, pero sin plato, con lo cual al ducharte el baño se llenaba de agua.
9:00h: A desayunar!!! El señor Wok se ha esmerado y nos ha preparado un super desayuno. Aunque a nosotros no termina de convencernos demasiado, agradecemos el esfuerzo. Tenemos sopa de arroz y sémola, bastante insípida, pepino agridulce, panecillos de masa de pan sin cocer, una especie de tiras de hojaldre horneado y un plato lleno de tofu.. Después del esmero del pobre hombre, hacemos lo que podemos para acabarnos lo máximo posible.
Le dejamos unas bolsas de ropa sucia para que nos haga la colada. Alquilamos unas bicis (7元 cada una) para todo el día y nos vamos camino de la estación de trenes a unos 2km fuera de la muralla. Queremos conseguir los billetes de tren de Nanjing a Tunxi, pero no hay suerte. Media vuelta.
Hoy nos dedicamos a ver las murallas, algunas casas típicas antiguas, templos y museos. Todos los edificios se organizan igual: dependiencias para dormir en los laterales, y templos en el centro y al final. Todos tienen exposiciones de los muebles de época. La única diferencia entre tanta mesa y silla, es que en el templo de Confucio, encontramos una sala muy curiosa. Es como un pequeño museo de los horrores, donde se explican las torturas que aplicaban las divinidades del infierno, mediante representaciones muy realistas y bastante dantescas.
14:30h: Paramos a comer en un restaurante con patio. Todo rico, menos la supuesta "sausage", que resulta ser tripa o algo raro de casquería (164元). Después de comer damos una vuelta por cerca de la muralla, pero hace bastante calor y Ana y yo nos vamos a que nos den un masaje.
17:30h: Durante una hora y por 66元 cada una, recibimos un masaje de todo el cuerpo, un poco doloroso, teniendo en cuenta que tenemos los músculos bastante cargados, pero a la vez relajante y tonificador. Mientras los chicos se van a Internet.
18:30h: Tenemos media hora para hacer unas compras. Ana compra un pack de hojas "antiguas" por 15元, y yo consigo el libro del arte de la guerra de Confucio, con una encuadernación muy bonita en bambú y seda por 100元.
19:00h: Ahora son los chicos los que han ido a darse un masaje de pies. Media hora por 30元 cada uno. Nosotras nos vamos a Internet. Nos sale gratis por consumir una coca-cola de 5元.
20:30h: Salimos fuera de la muralla a cenar algo en una terraza. Es como un buffet con cocina en directo, donde eliges lo que quieres, te lo cocinan allí mismo y te lo llevan a la mesa. Pedimos unas cazuelitas que te dan hirviendo con carne, noodles, verduras..unos caracolillos y unas brochetas. Todo por 117元. Nos acompañan la chica vasca y la chica colombiana que encontramos paseando por Pinyao.
22:15h: El señor Wok nos espera para recoger las bicis y llevarnos al hotel escondido. Hoy toca entrar por el restaurante. Al llegar vemos que nos ha recogido la ropa, la ha doblado y agrupado por categorías: pantalones, camisetas, ropa interior y calcetines. Este hombre es un encanto!!! Le agradecemos las molestias que se ha tomado y nos hacemos unas fotos con él y con su mujer.
Como nos da pena tener que volver a dejar parte del desayuno, intentamos explicarle que no nos pongan tofu ni pepino. Como la charla va para largo, yo me subo a la habitación, así que no sé qué se habrá conseguido. Mañana el desayuno será sorpresa...
Hoy en la tele están poniendo recetas de cocina con coca-cola. Estos chinos... Zzz Zzz
miércoles, 6 de mayo de 2009
MIÉRCOLES 06/05/09: WU TAI SHAN - TAIYUAN - PINYAO
7:15h: Debo llevar 2 horas despierta gracias a los malditos chinos. Ggrrrrrrr!!! No sé qué estaría pasando en el patio del hotel pero debía haber una veintena de personas dando voces, como si discutiesen por algo. No entiendo nada... En fin, recogemos las cosas y nos vamos. Compramos algo para desayunar y cogemos uno de los autobuses gratuitos y supermodernos que te transportan por el pueblo para recorrer todos los monasterios.
8:30h: Salimos de Wu Tai Shan en un bus viejo y maloliente (61元 cada uno). Durante el trayecto a Taiyuan, vamos parando para dejar y recoger viajeros, ir al baño, comer algo... En una de las paradas, suben dos vendedores de mazorcas cocidas (algunas son negras!!!) Como no! Samu tiene que probarlas. Ana compra una también (1,5元 cada una)
13:30h: Después de 5 horas en un bus sin amortiguación, llegamos a Taiyuan. Una ciudad sin ningún interés, pero necesaria para enlazar con los transportes a Pinyao (tren y bus). Cogemos una furgoneta para ir de la estación de autobuses a la estación de tren (20元). Una vez en la estación sufrimos el acoso de las miradas curiosas de los chinos que allí se encuentran, y los agobios de las "no-colas". En información no son capaces de darnos indicaciones en inglés. Al final tienen que ser los policias de la estación, los que nos escriban los horarios de los trenes. Como no nos queda claro que nos hayan contestado a lo que pedíamos, vamos a un hotel cercano a ver si alguien nos puede informar. Una chica muy amable y que habla un poco de inglés, nos consulta los horarios de tren a Nanjing para dentro de 2 días. Nos manda a buscar un "bussines center" para poder reservarlos o comprarlos. Salimos cansados, con calor, cargados con todas las mochilas...y no encontramos ningún bussines center, así que de vuelta al hotel a buscar a la chica. La pobre mujer, para que no volvamos a perdernos, se viene con nosotros por la calle para indicarnos dónde es. Resulta ser otro hotel, pero que resulta que allí tampoco hacen reservas de billetes, así que no queda más remedio que comprarlos nosotros mismos. La china nos escribe en un papel lo que tenemos que enseñar en la taquilla, y Ana y Joan se van a la estación a comprar.
15:30h: Mientras, el resto nos vamos al KFC de al lado a comer algo. Es alucinante, aquí hasta el pollo del KFC pica!!! aún así lo deboramos todo. Ñam, ñam, ñam... (32元 cada uno). Joan despotrica un poco por comer allí pero al final termina comiendolo todo, y es que a esas horas, comer de restaurante es imposible.
Ahora toca llegar a Pinyao. Nos olvidamos de ir en bus o tren, porque los horarios no nos convencen, así que buscamos una furgoneta que nos lleve. Entramos en el parking de la estación de trenes gritando: "Pinyao, Pinyao, y al medio segundo aparece una señora que nos lleva a una furgoneta. Mientras se negocia el precio, se forma el corro habitual de curiosos. (Es que no tendrán nada mejor que hacer??) Acordamos 280元. La furgoneta resulta estar en muy buen estado, con aire acondicionado, e incluso DVD en el parasol delantero. El conductor nos pone una peli en blanco y negro del desembarco de Normandía, en chino.. consecuencia.. caemos todos fritos...
18:00h: Ya estamos en Pinyao. Tiene una muralla imponente y muy bien conservada. Tenemos que pagar por entrar a la ciudad (45元 cada uno con DNI). Nada más atravesar los muros, se ven las calles enlosadas, las casitas bajas y antiguas, reconvertidas en tiendas de souvenirs, restaurantes, bares, hoteles, salas de masajes... Todo está adornado con farolillos rojos que destacan sobre la madera y el color oscuro de los tejados y las piedras. Toda la gente con la que nos cruzamos, parece muy amable a pesar de ser vendedores. Buscando el albergue juvenil recomendado en la Lonely, damos con un paisano de una tienda que nos ofrece alojamiento. Nos dice que es barato y si queremos podemos verlo. Le seguimos, mientras nos lleva por la trastienda compartida entre su tienda y el restaurante de al lado. Damos a un patio y a una casa particular que hace las veces de hotel clandestino o "Bed&breakfast" chino. Nos ofrece 2 habitaciones con baños (limpios, con taza y ducha) por 90元 la noche (todos). Tirado de precio!!!! Si queremos desayuno tradicional, serían 10元 por cada persona. Alquilar bicis, 10元 cada una, y hacernos la colada 10元. Por supuesto, nos quedamos!! Además el anfitrión y su mujer son personas encantadoras. Le ponemos nombre...señor Wok. Si, si, como el conductor que nos llevó a Wu Tai Shan. Para nosotros todos son Woks, jejejejejejeje.
Salimos a ver un poco el pueblo, y cenar algo. Hay tal cantidad de tiendas que se hace imposible ver más de una calle. Nos vamos parando en todos los puestos. Todos tienen cosas curiosas: ropitas típicas para niños, antigüedades (falsas, claro está), libros, comida, zapatillas.. hasta una tienda sólo de cajas de cerillas con carátulas de películas, personajes famosos, etc.. Un sitio muy curioso.
Encontramos un restaurante/hotel lleno de extranjeros como nosotros. Son los primeros que vemos en mucho tiempo, y parecen estar todos aquí. Nos damos cuenta que ese es el albergue que íbamos buscando al llegar, y que está recomendado en la Lonely Planet. Tiene el típico patio de las construcciones de Pinyao. Resulta ser la casa del antiguo gobernador del pueblo. Nos quedamos a cenar en el patio. Un sitio muy bucólico, donde nos tratan muy bien. Mientras cenamos conversamos con una chica argentina que está viajando por Asia con un grupo, en plan, meses sabáticos... Qué cantidad de gente nos cruzamos que viaja en este plan.. a mi que me lo expliquen.. cómo se puede ir uno 4 meses a viajar por ahí. Lo firmo ya!!!
Una anécdota de los platos que pedimos para cenar es, un plato de "sweet meatballs". Lo pedimos pensando en algo de carne sin aderezos ni revueltos, pero nos encontramos con unas pelotillas de una carne no muy reconocible, bañadas en caramelo de azúcar. Vienen acompañadas de un cuenco con agua. No entendemos el porqué de aquello, así que la dueña nos explica que hay que seguir unos pasos para comer este plato... Primero se coge una de las bolas, mientras el caramelo está fundido y pueden manejarse..A continuación se mete la bola, en el bol de agua, para que el caramelo se enfríe y se quede como una costra crujiente. Y en ese estado, se come. La teoría promete, pero al probar la primera bola... el resultado, más que satisfactorio, fue pegajoso. Imaginad, las dos mandíbulas unidas por una masa dulce y salada a la vez, con trozos de carne por medio... Si, algo bastante raro y difícil de comer. Y más aún cuando el caramelo se va quedando frio, y no hay quien separe las canicas de carne del plato. Toda una experiencia (a no repetir). La cena nos sale por 156元.
22:30h: Volvemos para el hotel porque nos cierran la puerta a las 23:00h. Al llegar a la tienda, vemos que está ya cerrada, pero el señor Wok nos espera sonriente en la puerta, con una linternilla. Nos mete por el callejón de atrás totalmente a oscuras. Subrealista! En cualquier momento nos lleva a la sala de las máquinas de coser y de allí no salimos, jejejejeje.
Ya estamos en la cama. La temática de hoy de la tele han sido los anuncios de laxantes (de nuevo) y de maquinaria de freidoras para hacer brochetas en la calle. Me voy a dormir. Zzz... Zzz..
8:30h: Salimos de Wu Tai Shan en un bus viejo y maloliente (61元 cada uno). Durante el trayecto a Taiyuan, vamos parando para dejar y recoger viajeros, ir al baño, comer algo... En una de las paradas, suben dos vendedores de mazorcas cocidas (algunas son negras!!!) Como no! Samu tiene que probarlas. Ana compra una también (1,5元 cada una)
13:30h: Después de 5 horas en un bus sin amortiguación, llegamos a Taiyuan. Una ciudad sin ningún interés, pero necesaria para enlazar con los transportes a Pinyao (tren y bus). Cogemos una furgoneta para ir de la estación de autobuses a la estación de tren (20元). Una vez en la estación sufrimos el acoso de las miradas curiosas de los chinos que allí se encuentran, y los agobios de las "no-colas". En información no son capaces de darnos indicaciones en inglés. Al final tienen que ser los policias de la estación, los que nos escriban los horarios de los trenes. Como no nos queda claro que nos hayan contestado a lo que pedíamos, vamos a un hotel cercano a ver si alguien nos puede informar. Una chica muy amable y que habla un poco de inglés, nos consulta los horarios de tren a Nanjing para dentro de 2 días. Nos manda a buscar un "bussines center" para poder reservarlos o comprarlos. Salimos cansados, con calor, cargados con todas las mochilas...y no encontramos ningún bussines center, así que de vuelta al hotel a buscar a la chica. La pobre mujer, para que no volvamos a perdernos, se viene con nosotros por la calle para indicarnos dónde es. Resulta ser otro hotel, pero que resulta que allí tampoco hacen reservas de billetes, así que no queda más remedio que comprarlos nosotros mismos. La china nos escribe en un papel lo que tenemos que enseñar en la taquilla, y Ana y Joan se van a la estación a comprar.
15:30h: Mientras, el resto nos vamos al KFC de al lado a comer algo. Es alucinante, aquí hasta el pollo del KFC pica!!! aún así lo deboramos todo. Ñam, ñam, ñam... (32元 cada uno). Joan despotrica un poco por comer allí pero al final termina comiendolo todo, y es que a esas horas, comer de restaurante es imposible.
Ahora toca llegar a Pinyao. Nos olvidamos de ir en bus o tren, porque los horarios no nos convencen, así que buscamos una furgoneta que nos lleve. Entramos en el parking de la estación de trenes gritando: "Pinyao, Pinyao, y al medio segundo aparece una señora que nos lleva a una furgoneta. Mientras se negocia el precio, se forma el corro habitual de curiosos. (Es que no tendrán nada mejor que hacer??) Acordamos 280元. La furgoneta resulta estar en muy buen estado, con aire acondicionado, e incluso DVD en el parasol delantero. El conductor nos pone una peli en blanco y negro del desembarco de Normandía, en chino.. consecuencia.. caemos todos fritos...
18:00h: Ya estamos en Pinyao. Tiene una muralla imponente y muy bien conservada. Tenemos que pagar por entrar a la ciudad (45元 cada uno con DNI). Nada más atravesar los muros, se ven las calles enlosadas, las casitas bajas y antiguas, reconvertidas en tiendas de souvenirs, restaurantes, bares, hoteles, salas de masajes... Todo está adornado con farolillos rojos que destacan sobre la madera y el color oscuro de los tejados y las piedras. Toda la gente con la que nos cruzamos, parece muy amable a pesar de ser vendedores. Buscando el albergue juvenil recomendado en la Lonely, damos con un paisano de una tienda que nos ofrece alojamiento. Nos dice que es barato y si queremos podemos verlo. Le seguimos, mientras nos lleva por la trastienda compartida entre su tienda y el restaurante de al lado. Damos a un patio y a una casa particular que hace las veces de hotel clandestino o "Bed&breakfast" chino. Nos ofrece 2 habitaciones con baños (limpios, con taza y ducha) por 90元 la noche (todos). Tirado de precio!!!! Si queremos desayuno tradicional, serían 10元 por cada persona. Alquilar bicis, 10元 cada una, y hacernos la colada 10元. Por supuesto, nos quedamos!! Además el anfitrión y su mujer son personas encantadoras. Le ponemos nombre...señor Wok. Si, si, como el conductor que nos llevó a Wu Tai Shan. Para nosotros todos son Woks, jejejejejejeje.
Salimos a ver un poco el pueblo, y cenar algo. Hay tal cantidad de tiendas que se hace imposible ver más de una calle. Nos vamos parando en todos los puestos. Todos tienen cosas curiosas: ropitas típicas para niños, antigüedades (falsas, claro está), libros, comida, zapatillas.. hasta una tienda sólo de cajas de cerillas con carátulas de películas, personajes famosos, etc.. Un sitio muy curioso.
Encontramos un restaurante/hotel lleno de extranjeros como nosotros. Son los primeros que vemos en mucho tiempo, y parecen estar todos aquí. Nos damos cuenta que ese es el albergue que íbamos buscando al llegar, y que está recomendado en la Lonely Planet. Tiene el típico patio de las construcciones de Pinyao. Resulta ser la casa del antiguo gobernador del pueblo. Nos quedamos a cenar en el patio. Un sitio muy bucólico, donde nos tratan muy bien. Mientras cenamos conversamos con una chica argentina que está viajando por Asia con un grupo, en plan, meses sabáticos... Qué cantidad de gente nos cruzamos que viaja en este plan.. a mi que me lo expliquen.. cómo se puede ir uno 4 meses a viajar por ahí. Lo firmo ya!!!
Una anécdota de los platos que pedimos para cenar es, un plato de "sweet meatballs". Lo pedimos pensando en algo de carne sin aderezos ni revueltos, pero nos encontramos con unas pelotillas de una carne no muy reconocible, bañadas en caramelo de azúcar. Vienen acompañadas de un cuenco con agua. No entendemos el porqué de aquello, así que la dueña nos explica que hay que seguir unos pasos para comer este plato... Primero se coge una de las bolas, mientras el caramelo está fundido y pueden manejarse..A continuación se mete la bola, en el bol de agua, para que el caramelo se enfríe y se quede como una costra crujiente. Y en ese estado, se come. La teoría promete, pero al probar la primera bola... el resultado, más que satisfactorio, fue pegajoso. Imaginad, las dos mandíbulas unidas por una masa dulce y salada a la vez, con trozos de carne por medio... Si, algo bastante raro y difícil de comer. Y más aún cuando el caramelo se va quedando frio, y no hay quien separe las canicas de carne del plato. Toda una experiencia (a no repetir). La cena nos sale por 156元.
22:30h: Volvemos para el hotel porque nos cierran la puerta a las 23:00h. Al llegar a la tienda, vemos que está ya cerrada, pero el señor Wok nos espera sonriente en la puerta, con una linternilla. Nos mete por el callejón de atrás totalmente a oscuras. Subrealista! En cualquier momento nos lleva a la sala de las máquinas de coser y de allí no salimos, jejejejeje.
Ya estamos en la cama. La temática de hoy de la tele han sido los anuncios de laxantes (de nuevo) y de maquinaria de freidoras para hacer brochetas en la calle. Me voy a dormir. Zzz... Zzz..
martes, 5 de mayo de 2009
MARTES 05/05/09: WU TAI SHAN
???h: No sé qué hora es, pero ya es de día. Supongo que las 5 y algo de la mañana. Ya se empieza a oir agetreo en la calle, gritos, música, coches... Así no hay quien duerma. Además, la luz que entra por las cortinas y las camas-tabla, no ayudan demasiado.
9:00h:Salimos a desayunar una especie de bollo frito de masa de churros sin azúcar, y un cuenco de leche de soja bastante insulsa.
Hoy nos toca visita a los monasterios de la zona. Por lo visto hay 108, pero nos vamos a quedar con 4 ó 5. El primero es el más alto de todos los cercanos al pueblo. Tiene un camino para subir andando o con mulas, otro camino de escaleras como las del monasterio que salía en la película de Kungfu Panda, y un telesilla. Ana y yo tenemos agujetas, así que nos vamos al telesilla y los chicos se van por el camino de cabras. Los precios del telesilla son: 35元 subir, 30元 bajar y 60元 subir y bajar. No hay descuento de estudiante.
La subida es lenta y da tiempo a apreciar el paisaje de la zona. Todo lleno de monasterios, grandes esculturas y las casitas del pueblo, todas grises de aspecto industrial.
Una vez arriba vemos como hay gente que viene peregrinando desde otros monasterios u otros pueblos. Los más debotos suben por las escaleras o el camino, siguiendo una especie de ritual: Cada tres pasos, deben arrodillarse e inclinarse en señal de oración otras 3 veces, tocando con la frente en el suelo.
Todos los templos guardan la misma distribución: un patio con estancias a los laterales, varios altares en el centro y quemadores de incienso. En los altares siempre se encuentra alguna divinidad dorada, acompañada de otras divinidades y rodeada de telas de color fucsia, dorado, naranja.. cuanto más llamativo mejor. También hay ofrendas de frutas, galletas, bebidas, caramelos, flores... Todo perfectamente colocado.
Ya que no podemos hablar con nadie que nos explique cuáles son los ritos típicos, me baso en lo que observo.. Parece que el ritual comienza en la entrada en la que hay que hacer 3 reverencias. Al llegar a uno de los quemadores de incienso, se cogen tres barritas con ambas manos y se hacen 3 reverencias en cada uno de los 5 puntos cardinales de los chinos (norte, sur, este, oeste y centro). Después se tiran las barritas a un cenicero gigante con forma de pagoda. Al ir entrando en los distintos altares, se arrodillan sobre unos cojines y dan 3 golpes con la frente en el suelo. Muchos dejan dinero en los altares o dentro de unos cuencos llenos de agua.
En un descuido, estaba yo paseando sola junto a la torre de la entrada, cuando se me acerca una monja ( con el pelo rapado y el mismo vestuario que los monjes hombres) y me enseña que tengo que colocar las manos juntas y seguirla. Tras dar 3 vueltas a la torre, se dirige al primer altar (y yo detrás). Al entrar, empieza a cantar una oración. Me intenta decir algo como que repita lo que ella pronuncia: "Un" "a" "ytsa" "ba" "ytsa" "na" "de". Así que allí me pongo a rezar no sé el qué, mientras los chinos del lugar me miran estupefactos. Le agradezco a la monja sus instrucciones y me voy, aunque ella quería que la siguiese por el resto de altares.
Ahora toca bajar las escaleras a pie. Ya nos tiemblas las piernas del cansancio. En el camino de bajada encontramos vendedores de rosarios budistas, monjes que suben mientras van barriendo las escaleras y pidiendo limosna para seguir su viaje. También se ven muchos lisiados que piden aprovechando el paso de los peregrinos.
Ya abajo, vamos a otro de los monasterios. Este es distinto, porque sólo tiene torres y da la sensación de ser una especie de cementerio.
El siguiente templo es el de la columna blanca gigante. Nos llama la atención que la base es circular y está compuesta de unos rollos labrados que giran sobre un eje.
La gente da tres vueltas haciendo girar los rollos. Van casi corriendo.
El último monasterio está desierto, no hay turistas, y los monjes están en el tiempo de rezo. Se sientan todos en filas de cojines, frente a unos pupitres bajitos donde tienen el té y el libro de oraciones. Todos cantan a la vez y tocan un tambor y una campana.
En este último monasterio, los del Paso de otros años, conocieron al maestro monje. Por lo visto es muy amable con los turistas y habla algo de inglés. Su nombre es algo como "Ai fan", pero entre nosotros le decíamos Iphone, como el teléfono de Apple. Preguntamos por él, y los monjes de la puerta nos dejaron pasar sin cobrarnos la entrada. Estuvimos esperando como una hora, y el monje no apareció. Así que decidimos irnos al pueblo.
En ese último monasterio, Samu conoció cómo es un baño de monjes. Por lo visto es una habitación con unas tablas con agujeros puestas sobre un lago de desechos. No se puede ni respirar allí dentro, así que sale espantado.
Una vez en el pueblo, damos una vuelta por un mercadillo callejero y algunos aprovechan para pasar por el ciber a conectarse un rato (3元/hora). Cenamos por 196元 y nos vamos al hotel, que mañana hay que madrugar para coger el bus a Pingyao.
Mientras escribo esto, los chicos se han ido de trekking nocturno a subir de nuevo al monasterio de Kungfu Panda, para ver el pueblo desde arriba por la noche.
En la tele están poniendo un programa para niños, como el de Rita Irasema a lo chino. Sale gente cantando y con distintas habilidades:
-Una chica que enseña a doblar servilletas con forma de kimono o de rosa.
-Un cortador de pepinos a ciegas, dándole forma de dragón.
-Otro cortador de vegetales que hace un pájaro y un crisantemo.
-Un chico que sirve el té con una tetera especial, que tiene el pitorro muy largo, y hace posturas raras para acertar a servir el té en los vasos.
No hay nada que merezca la pena en la tele..sólo culebrones chinos y anuncios de laxantes, así que... Zzz...Zzz...
9:00h:Salimos a desayunar una especie de bollo frito de masa de churros sin azúcar, y un cuenco de leche de soja bastante insulsa.
Hoy nos toca visita a los monasterios de la zona. Por lo visto hay 108, pero nos vamos a quedar con 4 ó 5. El primero es el más alto de todos los cercanos al pueblo. Tiene un camino para subir andando o con mulas, otro camino de escaleras como las del monasterio que salía en la película de Kungfu Panda, y un telesilla. Ana y yo tenemos agujetas, así que nos vamos al telesilla y los chicos se van por el camino de cabras. Los precios del telesilla son: 35元 subir, 30元 bajar y 60元 subir y bajar. No hay descuento de estudiante.
La subida es lenta y da tiempo a apreciar el paisaje de la zona. Todo lleno de monasterios, grandes esculturas y las casitas del pueblo, todas grises de aspecto industrial.
Una vez arriba vemos como hay gente que viene peregrinando desde otros monasterios u otros pueblos. Los más debotos suben por las escaleras o el camino, siguiendo una especie de ritual: Cada tres pasos, deben arrodillarse e inclinarse en señal de oración otras 3 veces, tocando con la frente en el suelo.
Todos los templos guardan la misma distribución: un patio con estancias a los laterales, varios altares en el centro y quemadores de incienso. En los altares siempre se encuentra alguna divinidad dorada, acompañada de otras divinidades y rodeada de telas de color fucsia, dorado, naranja.. cuanto más llamativo mejor. También hay ofrendas de frutas, galletas, bebidas, caramelos, flores... Todo perfectamente colocado.
Ya que no podemos hablar con nadie que nos explique cuáles son los ritos típicos, me baso en lo que observo.. Parece que el ritual comienza en la entrada en la que hay que hacer 3 reverencias. Al llegar a uno de los quemadores de incienso, se cogen tres barritas con ambas manos y se hacen 3 reverencias en cada uno de los 5 puntos cardinales de los chinos (norte, sur, este, oeste y centro). Después se tiran las barritas a un cenicero gigante con forma de pagoda. Al ir entrando en los distintos altares, se arrodillan sobre unos cojines y dan 3 golpes con la frente en el suelo. Muchos dejan dinero en los altares o dentro de unos cuencos llenos de agua.
En un descuido, estaba yo paseando sola junto a la torre de la entrada, cuando se me acerca una monja ( con el pelo rapado y el mismo vestuario que los monjes hombres) y me enseña que tengo que colocar las manos juntas y seguirla. Tras dar 3 vueltas a la torre, se dirige al primer altar (y yo detrás). Al entrar, empieza a cantar una oración. Me intenta decir algo como que repita lo que ella pronuncia: "Un" "a" "ytsa" "ba" "ytsa" "na" "de". Así que allí me pongo a rezar no sé el qué, mientras los chinos del lugar me miran estupefactos. Le agradezco a la monja sus instrucciones y me voy, aunque ella quería que la siguiese por el resto de altares.
Ahora toca bajar las escaleras a pie. Ya nos tiemblas las piernas del cansancio. En el camino de bajada encontramos vendedores de rosarios budistas, monjes que suben mientras van barriendo las escaleras y pidiendo limosna para seguir su viaje. También se ven muchos lisiados que piden aprovechando el paso de los peregrinos.
Ya abajo, vamos a otro de los monasterios. Este es distinto, porque sólo tiene torres y da la sensación de ser una especie de cementerio.
El siguiente templo es el de la columna blanca gigante. Nos llama la atención que la base es circular y está compuesta de unos rollos labrados que giran sobre un eje.
La gente da tres vueltas haciendo girar los rollos. Van casi corriendo.
El último monasterio está desierto, no hay turistas, y los monjes están en el tiempo de rezo. Se sientan todos en filas de cojines, frente a unos pupitres bajitos donde tienen el té y el libro de oraciones. Todos cantan a la vez y tocan un tambor y una campana.
En este último monasterio, los del Paso de otros años, conocieron al maestro monje. Por lo visto es muy amable con los turistas y habla algo de inglés. Su nombre es algo como "Ai fan", pero entre nosotros le decíamos Iphone, como el teléfono de Apple. Preguntamos por él, y los monjes de la puerta nos dejaron pasar sin cobrarnos la entrada. Estuvimos esperando como una hora, y el monje no apareció. Así que decidimos irnos al pueblo.
En ese último monasterio, Samu conoció cómo es un baño de monjes. Por lo visto es una habitación con unas tablas con agujeros puestas sobre un lago de desechos. No se puede ni respirar allí dentro, así que sale espantado.
Una vez en el pueblo, damos una vuelta por un mercadillo callejero y algunos aprovechan para pasar por el ciber a conectarse un rato (3元/hora). Cenamos por 196元 y nos vamos al hotel, que mañana hay que madrugar para coger el bus a Pingyao.
Mientras escribo esto, los chicos se han ido de trekking nocturno a subir de nuevo al monasterio de Kungfu Panda, para ver el pueblo desde arriba por la noche.
En la tele están poniendo un programa para niños, como el de Rita Irasema a lo chino. Sale gente cantando y con distintas habilidades:
-Una chica que enseña a doblar servilletas con forma de kimono o de rosa.
-Un cortador de pepinos a ciegas, dándole forma de dragón.
-Otro cortador de vegetales que hace un pájaro y un crisantemo.
-Un chico que sirve el té con una tetera especial, que tiene el pitorro muy largo, y hace posturas raras para acertar a servir el té en los vasos.
No hay nada que merezca la pena en la tele..sólo culebrones chinos y anuncios de laxantes, así que... Zzz...Zzz...
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